El Ministerio de Hacienda aclaró ayer, aunque no del todo, el escenario financiero en el que se moverán las comunidades autónomas en 2021. En una reunión telemática del Consejo de Política Fiscal y Financiera comunicó a las comunidades las nuevas reglas y las entregas a cuenta (transferencias ordinarias) que recibirán el próximo año, así como de las cuantías de otros fondos habilitados en un contexto de crisis marcado por la crisis sanitaria. El total, el sistema de financiación autonómica podrá nutrirse con hasta 140.000 millones de euros, 6.500 más que los consignados este año. Sin embargo, no todo el dinero procederá del sistema propiamente dicho, sino del endeudamiento, pues el Gobierno recomienda a las comunidades un déficit del 2,2% sobre el PIB para dotarse de más recursos y así poder superar las cifras de ingresos de 2020. Pero nada está cerrado a estas alturas, aunque lo cierto es que si las comunidades quieren aumentar sus recursos, lo harán a costa de un mayor endeudamiento, si lo aceptan.

De hecho, el conselleiro de Facenda, Valeriano Martínez, aseguró ayer que la Xunta solo conoce la cuantía de las entregas a cuenta, pero no de los demás conceptos, por lo que no sabe aún con cuántos fondos contará en 2021. Aún así, avanzó que el Ejecutivo gallego acelerará la elaboración de sus presupuestos para aprobarlos "mejor en febrero que en marzo" y que por el momento no podía asegurar sin serán expansivos o de contención, si bien la intención es blindar los servicios esenciales.

La pasada semana el Gobierno anunció la suspensión de las reglas fiscales para todas las administraciones durante 2020 y 2021, lo que supone dejar sin efecto los límites al endeudamiento y el objetivo de déficit. Y ayer tocó poner un poco de claridad al nuevo escenario.

En 2020, las comunidades autónomas recibieron por el sistema de financiación 115.662 millones (entregas a cuenta más la liquidación de 2018); 16.000 millones por el Fondo Covid-19 y otros 2.211 millones por el objetivo de déficit del 0,2% del PIB. En total, 133.873 millones.

Y para 2021 las autonomías recibirán el sistema de financiación 113.729 millones de euros (entregas a cuenta y liquidaciones de 2019), lo que supone 1.933 millones menos. Sin embargo, esa diferencia se compensaría con un mayor margen de déficit público, recomendado del 2,2% -no es de obligado cumplimiento para nadie, por lo que puede ser mayor o menor y tampoco habrá penalizaciones-. Serían algo más de 26.700 millones adicionales por esta la vía del endeudamiento, de los que el Estado aportaría mediante una transferencia extraordinaria 13.400 millones, para que realmente las comunidades solo tuvieran que recurrir a un déficit del 1,1% (13.270 millones), en caso de que se aceptara esta propuesta. En total, por tanto, serían 140.000 millones. "Las autonomías contarán en 2021 con los mismos recursos, incluso más que en 2020", sostuvo la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.

En todo caso, el reparto de estos 13.400 millones se discutirá en el Congreso para determinar si se distribuirán con los criterios aplicados al Fondo Covid de este año o según los del sistema de financiación.

La ministra también informó de que España recibirá del Fondo React-EU de Bruselas una preasignación de 12.436 millones de euros para paliar las consecuencias socioeconómicas de la pandemia, lograr la reactivación de sectores afectados y reforzar el sistema sanitario, de los que 8.000 se repartirían en 2021 y otros 2.000 en 2022 entre las autonomías, quedando el resto en manos del Ministerio de Sanidad.

Valeriano Martínez indicó que el desconocimiento de los criterios de reparto la transferencia de 13.400 millones del Estado y del Fondo React-EU, además de desconocer cómo quedarán los salarios de los funciones, es lo que impide a la Xunta conocer a estas alturas con cuánto presupuesto contará.