Quien pisa más de la cuenta el acelerador, se toma o una copa de más antes de ponerse al volante o contesta a una llamada de móvil o al Whatsapp mientras conduce no suele quedarse en una ocasión puntual. El infractor viario tropieza más de dos veces en la misma piedra. Y en el caso de Galicia el número de conductores con dos o más infracciones graves o muy graves interceptados cada año por las patrullas de la Guardia Civil de Tráfico o los radares de la DGT colocan a la comunidad entre las más reincidentes en carretera. A la cabeza de infractores viarios con al menos dos sanciones en un año se coloca Castilla y León, seguida de Asturias, Comunidad Valenciana y, en el cuarto puesto, los automovilistas gallegos. Así lo revela un estudio elaborado por Fundación Línea Directa, en colaboración con la Fundación Española para la Seguridad Vial (Fesvial), Reincidentes viales: un peligro para todos. Análisis y evolución 2009-2018.

Aunque tan solo son interceptados unos 45.000 conductores de riesgo cada año en la red viaria de todo el país, el 55% de los automovilistas censados en España (es decir 15 millones) se reconoce como reincidente vial y admite tener conductas de riesgo al volante. Este perfil en Galicia es más elevado, ya que supera el 60%, lo que deja un balance de un millón de conductores en la comunidad que reinciden en la comisión de infracciones grave o muy graves al menos dos veces en el último año. Pero, según aseguran, solo un tercio ha sido multado en alguna ocasión.

Según advierte el director general de la Fundación Línea Directa, Francisco Valencia, este 55% del conjunto nacional o el 61% de Galicia es una cifra mucho más elevada que los 570.600 sancionados en los últimos 10 años en el país y los 45.000 reincidentes identificados que circulan cada año en las carreteras españolas, en torno al 10% en la red viaria gallega. De hecho, indica que los datos oficiales son solo "la punta del iceberg".

Del millón de conductores gallegos que se reconocen como reincidentes viales, 897.000 (51%) afirman conducir de manera habitual por encima de los límites de velocidad; 425.000 (24%) no respetar la distancia de seguridad; 173.000 (10%) utilizar el móvil al volante, y 77.000 (4%) hacerlo bajo la influencia del alcohol. Sin embargo, solo el 33% de ellos reconoce haber sido sancionado alguna vez por saltarse las normas de tráfico, según el informe de la Fundación Línea Directa. Pero los datos sobre conductas temerarias al volante son impactantes: hasta 19.000 gallegos han llegado a admitir que suelen circular por zonas urbanas por encima de 110 km/h, el mismo porcentaje que reconoce que en último año condujeron bajo los efectos de un consumo elevado de alcohol, drogas o ambas sustancias, y más de 100.000 sin haber siquiera pasado por la autoescuela para sacarse el carné de conducir.

El perfil del reincidente vial, según detalla el estudio, es hombre, de mediana edad, con más de 10 años de carné y mayoritariamente sancionado por sobrepasar los límites de velocidad.

Durante la última década, más de 270.000 conductores perdieron en España el carné al agotar todos sus puntos por la acumulación de infracciones al volante, de los que más de 18.000 lo perdieron dos o más veces. En el caso de Galicia, Tráfico apartó de la carretera a más de 27.000 automovilistas: más de 24.000 por haber dejado su contador de créditos a cero y cerca de 3.000 tras haber sido condenados por orden judicial tras un quebrantamiento de condena.