El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, avanzó esta mañana en el Parlamento que las restricciones adoptadas en las últimas semanas empiezan a dar sus frutos en ciudades como Santiago y Ourense, pero advierte que “hay que mantener las alertas encedidas”. Por esta razón, anunció nuevas medidas para mejorar el sistema de rastreo de contactos de casos de Covid-19 y un plan piloto para la detección precoz del virus en residencias de ancianos a través del análisis de sus aguas residuales.

En concreto, explicó que se pondrán en marcha cinco medidas para mejorar el rastreo de contactos. Por un lado, habrá “una mayor especialización en la central de seguimiento, creando áreas de vigilancia como la que ya se creó para el ámbito de la educación”, también se pondrá a disposición de los gallegos una “autodeclaración” para que puedan rellenar por internet si han estado en contacto con algún positivo descargando así de trabajo a los profesionales de Atención Primaria. Además, se han puesto a disposición de las urgencias hospitalarias y de los centros de salud otros 300.000 test de antígenos. Y las personas detectadas como contacto estrecho de un positivo se darán de alta automáticamente en la plataforma Telea, de atención a domicilio: “permitiendo así que los profesionales de Primaria tengan información histórica en caso de que resulte finalmente positivo”, según aclaró Feijóo.

Según explicó, uno de los objetivos de la Xunta es “evitar el confinamiento general”, pero advirtió que “lamentablemente no se puede desechar un modelo de cierre y aperturas progresivas hasta que haya vacuna”. En su comparecencia ante el Parlamento explicó además que el comité clínico está analizando cúal será el criterio en diciembre para levantar las restricciones adoptadas la semana pasada y que afectan especialmente a 60 concellos gallegos. “Se continúa la tendencia a la baja a lo largo de diciembre se podrán aliviar algunas o bastantes de estas restricciones”, avanzó.

Feijóo anunció también que el Consello de la Xunta aprobará mañana una nueva línea de financiación para los sectores más castigados dotada de 10 millones de euros.

Y aprovechó para cargar con dureza contra el Gobierno al que definió como “intermitente” en la gestión de la crisis. Lamentó que esté “ausente” en relación a la pandemia y sea “hiperactivo en dividir a la sociedad” como propuestas como la de eliminar el castellano como lengua vehicular en la educación.

En la última réplica Feijóo por fin desveló que Galicia cuenta con 700 rastreadores a tiempo completo más los 5.600 profesionales de Atención Primaria que también buscan a los contactos de los positivos.