Toca conducir a contra tiempo. Con la llegada del otoño, la lluvia, el granizo, las heladas y la niebla se convierten en compañeros de cada viaje. Para evitar que cualquier percance al volante acabe en un desenlace fatal, a la atención que debe prestarse a la carretera con condiciones meteorológicas adversas se suma la necesidad de la puesta a punto del vehículo.

El estado de los neumáticos y las luces en esta estación del año, que junto con el invierno concentran casi el 20% de los accidentes mortales ocurridos en la red viaria gallega, es fundamental ante cualquier desplazamiento. Para garantizar la revisión de estos dos elementos clave en la seguridad durante la temporada invernal, la DGT pondrá en marcha desde hoy hasta el jueves una campaña específica en Galicia para controlar el estado del parque móvil.

Desde Tráfico advierten además de las consecuencias que tiene la antigüedad de un vehículo en caso de accidente. Según un estudio de la DGT, el riesgo de fallecer o resultar herido grave se multiplica por dos al comparar los accidentes ocurridos con vehículos de 10 a 15 años de antigüedad, en relación con los de menos de 5 años. El año pasado, casi el 60% de los coches implicados en un accidente mortal en las vías interurbanas de la comunidad superaba los diez años., según detallan desde la Delegación del Gobierno en Galicia.

Esta situación ha llevado a las Jefaturas de Tráfico en la comunidad a incluir en el calendario anual de campañas una dedicada exclusivamente a la vigilancia de las condiciones de los vehículos que circulan por las carreteras y, en concreto, al estado de los neumáticos y las luces como elementos claves en la seguridad.

En el caso de los neumáticos, constituyen el único y decisivo contacto con la carretera. Aproximadamente más de un millón de los vehículos, un 5%, circulan con defectos graves en las ruedas, principalmente por llevar una profundidad del dibujo por debajo del mínimo legal de 1,6 mm; tener un desgaste irregular debido a una mala suspensión o una alineación incorrecta y circular con una presión errónea. Además, los vehículos relacionados con un uso más profesional como es el caso de las furgonetas, presentan mayores índices de defectos en los neumáticos.

También es necesario comprobar regularmente la presión del neumático en frío y la rueda de repuesto, así como revisar posibles fugas de aire por las válvulas.

En cuanto a las luces, su finalidad no solo es la de ver, sino también la de ser visto. Para que la conducción se realice en condiciones de seguridad, se aconseja prestar una especial atención a la utilización, mantenimiento y regulación de los faros, para conseguir, por un lado, disponer de luz suficiente y, por otro, no deslumbrar a quién circula por las mismas vías públicas.