Cada 1 minuto y 46 segundos, el seguro da respuesta a una víctima de accidente de tráfico en las carreteras o calles de la geografía española. Galicia es una de las comunidades que está marcada en rojo por su elevada siniestralidad mortal, la cuarta en el conjunto del país con más del 9% de los fallecidos en el asfalto. Y Pontevedra y A Coruña, por este orden, son las que requieren una mayor intervención de las aseguradoras por simples daños materiales o por las lesiones o fallecimientos por una colisión, salida de vía o atropello, ambas provincias con tasas que se sitúan por encima de la media nacional, según recoge el informe El daño corporal en accidentes de tráfico en 2019 publicado ayer por la patronal del seguro Unespa. Pontevedra ocupa el segundo puesto del ranking nacional en cuanto a víctimas por cada 10.000 habitantes: 111, casi el doble que la media en el conjunto del país (62,26) y A Coruña se coloca en el duodécimo puesto con una tasa del 68,39, seis puntos por encima de la media. A la cabeza de la tabla nacional, Cádiz con un índice del (120,59). En el extremo opuesto de la balanza se colocan las provincias de Lugo (puesto 24 con un índice del 50,52) y de Ourense (en el 34, con un 40,39).

Casi 298.000 víctimas de accidentes de tráfico, entre heridos, fallecidos y familiares de estos últimos. Es el balance de los partes que llegaron en 2019 a las aseguradoras en España. La mayoría son siniestros leves y tan solo dejan daños materiales, es decir, la factura de chapa y pintura del vehículo accidentado o del inmueble o los bienes afectados por la colisión o salida de vía. En los casos en que se producen lesiones, lo habitual es que sean temporales sin secuelas y que las víctimas se recuperen plenamente. En concreto, el seguro atendió en España 230.000 casos de estas características el año pasado. Pero, además, las aseguradoras asistieron a más de 60.000 heridos que tuvieron algún tipo de secuela. Seis de cada diez lesionados tenían entre 26 y 55 años.

La secuela más habitual afecta al sistema músculo esquelético (78,1% de las lesiones). Le siguen en el ranking los perjuicios estéticos (casi el 16%) y los daños al sistema nervioso (3,3%).

En términos generales, las provincias de costa en España registran peores datos que las de interior en materia de seguridad vial. En el conjunto del país, hasta un total de 14 provincias presentan una ratio "alta" de accidentes con víctimas: junto con A Coruña y Pontevedra están en esta lista Cádiz, Murcia, Sevilla, Málaga, Las Palmas, Almería, Baleares, Granda, Santa Cruz de Tenerife, Cantabria, Alicante y Huelva, según el informe divulgado ayer por Unespa. En el extremo opuesto están Teruel (17,89 siniestros por cada 10.000 habitantes), Soria (26,56), Ávila (27,38) y Segovia (28,05), los únicos territorios con una tasa inferior al 30.

De los más de 293.000 accidentes con víctimas que dieron parte al seguro el año pasado en España -uno cada casi dos minutos-, Galicia concentró casi 21.000, lo que supone el 7% del total. En términos absolutos, las provincias con más población son las que registraron el mayor volumen: Barcelona (32.235, casi el 11% del total) y Madrid (30.482, el 10,4%). De Galicia, Pontevedra irrumpe como la novena provincia española con más siniestros con víctimas: 10.417, el 3,55% del total, lo que una media de uno cada 50 minutos y 27 segundos. En el puesto 14, A Coruña con 7.670 accidentes, el 2,62% del conjunto del país -uno cada hora y 8 minutos-. Alejadas de estas cifras están las provincias de Lugo, con 1.661 casos (0,57%, en el puesto 34), y de Ourense, con 1.239 (0,42%, en el número 41 de la lista nacional).

El perfil más común de los accidentes de tráfico ocurridos el año pasado es que solo deja una lesión temporal (casi el 59%). Entre este tipo de siniestros y los que una persona sufre secuelas se concentran tres cuartas partes del total.

En cuanto a los partes del seguro tras un accidente mortal, las aseguradoras el año pasado recibieron el mayor volumen de asistencias de Andalucía (17,44%), seguida de Cataluña (16,02%), Madrid (10,34%) y en el cuarto puesto Galicia (9,13%). A la cola, Cantabria (0,41%), La Rioja (1,01%) y Navarra (1,22%). De las provincias con familiares indemnizados por un accidente mortal, Madrid está a la cabeza, seguida de Barcelona, Málaga y Baleares. En el mapa nacional las provincias de Pontevedra y A Coruña también están pintadas en rojo, ya que se colocan en el puesto número 8 y 13, respectivamente. En la parte media de la tabla está Lugo (puesto 24) y en la cola, Ourense (38).

La primera mitad del año concentra más víctimas de tráfico que el segundo semestre. Por días de la semana, el viernes es la jornada con más siniestros. Sin embargo, los accidentes más graves -con heridos de mayor gravedad o más fallecidos- se dan en los períodos vacacionales. En concreto, en junio, julio, agosto y diciembre. De la misma forma, los accidentes que ocurren en domingo y lunes (probablemente, de madrugada), son los de mayor impacto de toda la semana, según el estudio de daños de 2019 de Unespa.

En el conjunto del país, existe una brecha importante entre las jornadas con más accidentes con víctimas (982 siniestros) y las que menos (132). Este mínimo, curiosamente, se produjo el día de Navidad y la jornada con más siniestros con heridos o fallecidos fue el viernes 15 de marzo, con un accidente en el asfalto cada minuto y medio.

De las cuatro provincias gallegas, en A Coruña se registraron más siniestros graves respecto del conjunto del país en los meses de mayo, julio, julio y agosto. En Lugo solo se salvó con un porcentaje menor que la media nacional el mes de marzo; el resto del año fue superior, lo que sitúa a la provincia gallega como la única de la comunidad marcada en rojo en el mapa de la gravedad de los daños en accidentes viarios.

En Ourense, solo marzo y julio registran colisiones o salidas de vía con más heridos o muertos que el resto del país. Y en Pontevedra, casi la mitad del año es superior (abril, julio, agosto, octubre y diciembre).