Alcohol y drogas son un auténtico cóctel molotov para la conducción. Detrás de uno de cada tres accidentes mortales ocurridos en las carreteras gallegas están una copa de más, el consumo de cocaína, cannabis, hachís, entre otras sustancias estupefacientes. Visión doble, menor campo visual, ralentización de los reflejos, alucinaciones, excitabilidad emocional, descoordinación, tolerancia al riesgo o subestimación de la velocidad. Son algunos de los efectos que produce el consumo de alcohol y/o drogas al volante. Ante la tendencia al alza de narcotest positivos y la dificultad de corregir a quienes se ponen con una copa de más al volante, Tráfico puso en marcha este mes una campaña especial de vigilancia en la red viaria gallega. ¿El resultado? Más de 40 conductores interceptados cada día con una tasa de alcohol superior a la permitida y más de una veintena bajo los efectos de otras drogas.

En solo una semana, entre el lunes 7 y el domingo 13 de este mes, los agentes de Tráfico de la Guardia Civil realizaron en las carreteras de la comunidad más de 16.500 pruebas (un total de 16.156 de alcohol y 356 de drogas), según datos facilitados por la Jefatura de Tráfico de A Coruña, desde donde se coordinan los centros territoriales de Galicia. Desde que se hicieron test de drogas ha ido en aumento el número de infractores detectados, con casi la mitad de positivos de las pruebas realizadas. En el operativo especial de diciembre, revelaron consumo de drogas un total de 165 conductores, lo que supone una tasa infractora del 46,3% y una media de 23 interceptados cada día.

De las cuatro provincias, Ourense y Lugo, por este orden, protagonizaron los índices más altos de narcotest positivos, un 65% y 58%, respectivamente. En los controles en A Coruña y Pontevedra, la cifra de conductores sorprendidos tras haber consumido cocaína, hachís o cannabis se queda por debajo de la media autonómica pero no deja de sorprender una tasa tan elevada: un 45% en el caso de las pruebas en la red viaria coruñesa y un 41% en las carreteras pontevedresas. Bien es cierto que se realizaron más narcotest en A Coruña (123) y Pontevedra (163) que en Lugo (33) y Ourense (37). De los 165 interceptados por consumo de drogas, Pontevedra está a la cabeza con 67; seguida de A Coruña con 55; Ourense con 24 y finalmente Lugo con 19.

En cuanto al consumo de alcohol, fueron interceptados 305 conductores con una tasa superior a la permitida en solo siete días. Aunque el índice de infractores está lejos de los positivos por drogas, la curva no se logra doblegar ya que se trata de conductas difíciles de corregir, ya que en su mayoría se tratan de casos de dependencia. Los más de 40 interceptados de media cada día en las carreteras gallegas con una copa de más suponen el 1,88% de los controlados. Por provincias, Pontevedra presenta la tasa más alta de la comunidad (2,6% de las pruebas practicadas en la red viaria pontevedresa), con 89 positivos, junto con A Coruña (2,3%), con 88 expedientes sancionadores abiertos. Casi a la par que la media autonómica están las infracciones por alcohol detectadas en Ourense (1,9%), con 83 denuncias. Y finalmente, Lugo (0,97%), con 45 denuncias.

Varones de más de 45 años

Entre enero y septiembre, según datos de la Delegación del Gobierno en Galicia, la Guardia Civil de Tráfico realizó en las carreteras de la comunidad 318.878 pruebas de alcoholemia, de las que 5.300 —el 1,6%— arrojaron un resultado positivo. O lo que es lo mismo, una media de 20 conductores son interceptados cada día en estado ebrio. El perfil de este tipo de infractores es el de un varón de entre 45 y 54 años. En cuanto al consumo de drogas, la Guardia Civil practicó 4.575 narcotest en los primeros nueve meses de este año, de los que 1.764 el —38,5%— conllevaron una denuncia por positivo. El cannabis y la cocaína fueron las más frecuentes. En la campaña de este mes de diciembre, se dobló el número de conductores interceptados bajo los efectos del alcohol y la tasa de narcotest positivos es de casi 10 puntos más.