Allí donde la naturaleza parece infranqueable, en las cumbres, en los caminos más inaccesibles, en las cuevas con agua o en los barrancos, los guardias de rescate en montaña consiguen llegar. A Pobra de Trives, un municipio del Macizo Central de Ourense de unos 2.000 habitantes, alberga la única unidad en Galicia del instituto armado que está especializada en este tipo de salvamentos. La sede se instaló en 1982, vinculada a la estación de esquí de Cabeza de Manzaneda. Son el Equipo de Rescate e Intervención en Montaña (Ereim). El lunes, aprovechando la primera jornada de nieve que tiño de blanco parte de la montaña de Ourense en estos días finales del año, esta unidad realizó prácticas para mantener su entrenamiento al día. Acudieron a la estación de montaña de Manzaneda, que permanece cerrada desde el inicio de la pandemia.

El Ereim, que cuenta con un guardia formado como guía de perros, con un can especializado en búsqueda en grandes áreas y, en concreto, en avalanchas, realizó una simulación de un rescate de una persona sepultada tras un alud. Unas imágenes de dron grabadas por los guardias muestran cómo la nieve cubre pistas y remontes de Manzaneda. Se trata de un polo de atracción turística cuya inactividad desde hace más de nueve meses causa un impacto negativo en la economía de la comarca, una de las zonas más afectadas por la crisis demográfica y, por tanto, más necesitadas de cualquier impulso socioeconómico. “Solo podemos pedir una cosa. Que abra la estación cuanto antes”, escribía ayer en su perfil de Facebook la publicación web no oficial de la estación, manzaneda.info.