El mal funcionamiento de un horno o de una caldera de una panadería situada en el bajo de un edificio es, probablemente, la causa por la cual una mujer y su hija tuvieron que ser trasladados en Lugo por los servicios sanitarios al presentar síntomas de intoxicación por monóxido de carbono.

Todo comenzó al hilo de la una de esta tarde, informa el 112. Fue en ese momento cuando uno de los miembros de una de las viviendas de un edificio situado en A Estrada Vella, en Esperante, llamó al 112 Galicia para informar de la situación. Indicaba en esa comunicación que toda la familia, siete miembros, se había levantado con los mismos síntomas, mareos, vómitos, que las paredes de la casa estaban ennegrecidas y que había olor a plástico quemado. Enseguida, desde el 112 Galicia se informó al Servicio de Urgencias Sanitarias de Galicia-061 que confirmaron que en la vivienda residían siete personas y que solo una mujer y su bebé tuvieron que ser trasladados. Además, indicaron que una ambulancia medicalizada se encontraba en el punto por si era precisa alguna otra intervención.

Asimismo, los gestores del 112, además de poner los hechos en conocimiento del personal sanitario, informaron a los Bomberos de la ciudad, que también se desplazaron enseguida hasta el lugar, así como a la Policía Local y a los efectivos de Protección Civil. Finalmente, tras hacer las correspondientes mediciones, los Bomberos indicaron que se trató de una intoxicación por monóxido de carbono que afectó a todos los pisos del inmueble debido, posiblemente, al mal funcionamiento de un horno o de la caldera de una panadería situada en el bajo del edificio.

Por eso, comunicaron que volverían a hacer nuevas mediciones. Con todo, los servicios sanitarios confirmaron que, tras derivar al punto dos ambulancias, solo tuvieron que trasladar a la mujer y a su hija por intoxicación. Sin embargo, sí concretaron que varios vecinos tuvieron que ser atendidos en el mismo lugar por inhalación de humo pero no necesitaron ser trasladados.