El juzgado de lo Mercantil 3 de Pontevedra ha estimado íntegramente una demanda interpuesta por la Fiscalía Provincial contra una empresa que, en una tienda de Vigo, vendía patinetes eléctricos de 2.000 vatios de potencia, considerados ciclomotores o motocicletas, y que aseguraba a sus clientes que los vehículos no necesitaban ni seguro, ni carné, ofreciendo, por tanto, una “información engañosa”.