El paso de la borrasca Justine por la comunidad gallega dejó rachas superiores a los 120 kilómetros en algunos puntos de la costa coruñesa y luguesa, donde ayer estaba activa la alerta roja por oleaje.

Según los datos de MeteoGalicia, las rachas máximas se han registrado en Viveiro y Cedeira, en las estaciones de Penedo do Galo y Punta Candieira, con vientos que superaron los 124 y los 122 kilómetros por hora, respectivamente.

Estas cifras se superaron en las estaciones situadas por encima de los 900 metros de altura, especialmente en O Xistral (Muras), donde se registró una racha máxima por encima de los 140 kilómetros por hora.

No obstante, la borrasca no dejó incidencias de gravedad en el territorio gallego.

Ayer, el 112 dio aviso por riesgo de desbordamiento de los ríos Lérez y Miñor, situados respectivamente en los municipios de Pontevedra y Gondomar, debido a las intensas lluvias registradas en el territorio.

La Rede de Aforos de Augas de Galicia detectó que el caudal de estos cursos fluviales se incrementó de forma significativa debido a las precipitaciones registradas por lo que existe riesgo de crecidas y desbordamientos en el entorno.

De hecho, la Xunta mantiene activado el Plan Especial para o Risco de Inundacións en Galicia (Inungal) e insta a atender las medidas de precaución necesarias para evitar riesgos.

Los puntos que registraron mayor acumulación de agua fueron Lousame y Boiro, ambos en la provincia de A Coruña, con 67,5 litros por metro cuadrado y 52,1, ambos en la jornada del viernes.

Hoy, una nueva borrasca

Hoy se esperan abundantes lluvias en la comunidad debido a la entrada de una nueva borrasca atlántica y a que la borrasca Justine se desplazará rápidamente del golfo de Vizcaya hacia el mar Adriático, según informó la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Así, se esperan precipitaciones abundantes en Galicia, que podrían ser localmente persistentes en el oeste de la comunidad.