El alcalde de Vigo y presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), Abel Caballero, aprovechó la victoria electoral en Cataluña del socialista Salvador Illa, exministro de Sanidad, para añadir presión sobre el liderazgo ejercido en Galicia por Gonzalo Caballero, que ha reiterado sentir la confianza del partido en su proyecto, pese a que en las últimas elecciones autonómicas fue superado por el BNG y no pudo capitalizar el apoyo del Gobierno central presidido por su jefe de filas, Pedro Sánchez, ni la debacle del rupturismo, desaparecido del mapa gallego. Mantuvo sus 14 actas y ha alertado contra la tentación de “cambiar de entrenador cada año”.

En unos comicios “hay que presentar a los mejores candidatos y no vale solo la parte de apoyo orgánico”, declaró ayer el regidor olívico, quien apostilló que sus palabras no se referían a ningún “caso concreto” y solo eran una reflexión general. “Es el modelo que a mí me gusta: las candidaturas tienen que integrar a referentes sociales y los partidos tienen que pensar en los ciudadanos, no solo en las estructuras orgánicas”, añadió.

Sus palabras reabren el debate hibernado en el seno del PSdeG sobre el liderazgo actual. Un sector del partido, integrado por pesos pesados territoriales, considera que la decepción de los resultados de julio impiden a Gonzalo Caballero seguir al frente de la formación, si bien existen dos frentes para descabalgarlo. Por un lado, las primarias a la Secretaría Xeral aplazadas, que se celebrarán después de un congreso federal aún sin fecha. Por otro, la consulta para la candidatura a la Presidencia de la Xunta, para la que faltan tres años y medio.

El líder de la FEMP aclaró que su ámbito político se enmarca en España, el contexto municipal, la Ejecutiva Federal del PSOE y Vigo, desligándose del debate autonómico, al tiempo que eludió concretar si cree que el PSdeG siguió el modelo Illa que ayer alabó en las pasadas elecciones gallegas. Respondió que no quiere “mirar al pasado”, sino al futuro. Eso sí, rebajó tensión sobre el líder del PSdeG, su sobrino, al recordar a Guillermo Fernández Vara en Extremadura. “Puede haber referentes sociales que no ganen unas elecciones por circunstancias del entorno o por pactos espurios, pero no voy a entrar en polémicas”, concluyó.