Un centenar de personas se concentraron ayer en Santiago para mostrar su rechazo ante el plan forestal aprobado por la Xunta, que según dicen, responden únicamente “a intereses productivistas” y “carece de consenso social”.

Con proclamas como “Monte galego, con futuro”, “Partido Popular, enemigo del rural” o “A terra é nosa, e non da celulosa”, los manifestantes, convocados por la Plataforma Por un Monte Galego con futuro aprovecharon que ayer se celebraba el Día Internacional de los Bosques para pedir la anulación del plan, así como la elaboración de una nueva planificación del monte. La protesta se repitió en una veintena de concellos, en los que se leyó en contra de un plan que “pone la ordenación de los usos del monte en manos de las empresas madereras y forestales y deja de lado el interés general, sin contemplar la necesidad de mantener una reserva ecológica de hábitats naturales”.