La presidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera, anunció ayer una inversión de su departamento de en torno a 100 millones para la adaptación de gálibos de túneles que permitan el tráfico de trenes cargados con semirremolques para hacer realidad lo antes posible la autopista ferroviaria Algeciras-Zaragoza, parte del Corredor Mediterráneo.

El impulso a esa red contrasta con la espera por parte de Galicia y todo el Noroeste de la concreción de los proyectos para el Corredor Atlántico, que dará una salida a europea de primer nivel a las mercancías de esos puntos de la península ibérica.

El impulso a la conexión entre Zaragoza y Algeciras fue anunciado ayer en una jornada en la capital aragonesa centrada en esta infraestructura, que cerró el ministro de Transportes, Movilidad, José Luis Ábalos. Este subrayó que este proyecto supone una apuesta por la intermodalidad en los flujos de mercancías que circularán por el ramal central del Corredor Mediterráneo, combinando ferrocarril y carretera “de la forma más eficiente posible”.

Según Ábalos, es el objetivo primordial de la inversión ya realizada en el ramal central, de unos 70 millones, y de las actuaciones previstas con una dotación de 64 millones en los presupuestos de este año, para servir de impulso al uso del modo ferroviario para mover mercancías desde el puerto de Algeciras hasta Zaragoza y el resto de Europa.

Pardo de Vera destacó que Adif lleva ya dos años trabajando en el proyecto de esta autopista ferroviaria, primeramente con un diagnóstico de la infraestructura existente y un esquema de explotación para optimizar las inversiones que se acometan, y remarcó que es un objetivo prioritario que se ponga en servicio lo antes posible, dado el interés manifestado por los operadores. En ese punto, destacó las limitaciones que suponen la altura en los túneles y detalló que se ha optado por el gálibo P-420 para permitir el transporte de semirremolques y cubrir casi toda la demanda de puertos y operadores.