Los juzgados gallegos arrancaron el año con miles de montañas de casos atrasados por el parón impuesto por el COVID durante el estado de alarma. Pero el primer trimestre de 2021 marcó el inicio de una nueva etapa en los órganos judiciales de la comunidad, con un aumento de los asuntos resueltos (18,5% más) y una caída de los procedimientos pendientes (4,3% menos). “Esta disminución del número de casos pendientes con respecto al inicio del periodo demuestra el esfuerzo que se está realizando por parte de todo el personal de la Administración de Justicia de la comunidad”, destacan desde el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG).

Entre enero y marzo, los tribunales gallegos resolvieron 87.155 asuntos frente a los 73.312 de hace un año. El informe del Consejo General del Poder Judicial refleja la incidencia que tuvieron el confinamiento y la suspensión de la actividad, pues los órganos gallegos tenían el 1 de enero 167.852 asuntos en trámite, un 7,4% más que a principios de 2020. Además, terminaron marzo con 161.572 procedimientos pendientes, un 3,7% menos que al inicio del periodo y un 4,3 % más que en las mismas fechas del año anterior.

En total, los órganos judiciales ingresaron 81.761 asuntos, un 11,8% más que en el mismo periodo de 2020, cuando recibieron 72.877 casos.

En cuanto a la tasa de litigiosidad, es decir, el número de procedimientos por cada mil habitantes, se situó en la comunidad en 30,3, frente a los 33,2 de media estatal.