La Eurocámara ha reclamado la aceleración del despliegue del sistema europeo de gestión del tráfico ferroviario, el conocido como ERTMS, que es el mecanismo de frenado que faltaba en la línea Ourense-Santiago, donde se produjo el accidente del tren Alvia hace ahora casi ocho años.

El siniestro, que provocó 80 muertes y 144 heridos, tiene pendiente la apertura de juicio oral con el maquinista y el exresponsable de seguridad de Adif como presuntos autores de esos delitos de homicidio y lesiones por imprudencia profesional grave.

“El despliegue del sistema es demasiado lento y requiere una mejor coordinación y más inversiones”, advierten los eurodiputados. La resolución sobre seguridad y señalización ferroviaria, aprobada por 667 votos contra 11 y 14 abstenciones examina el ERTMS y pide su “pleno” despliegue. Los eurodiputados destacan que, a pesar de las iniciativas anteriores, el despliegue del ERTMS está “muy retrasado” y aún no se ha logrado la interoperabilidad “total”. Sugieren, así, que el despliegue completo “aumentaría la capacidad de tráfico hasta en un 30% en la infraestructura ferroviaria existente”.