El coste de la extinción de los incendios forestales en Galicia el año pasado, durante el que ardieron casi 15.000 hectáreas, alcanzó los 61,5 millones de euros de importe, lo que supone un gasto medio de 4.100 euros por hectárea calcinada, según los datos aportados por la Asociación Ecologista Arco Iris y recogidos del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico.

Además de estos costes de extinción, “un disparate” en palabras de Arco Iris, el ministerio estima que los costes de restauración de esas áreas quemadas ascenderán hasta los 90 millones de euros.

El primer año tras el incendio, las instituciones deben desembolsar 3.000 euros por hectárea para recaudación. Del segundo al undécimo año, la inversión es de 300 euros anuales.

Impacto de 151,5 millones

Estos datos, compartidos por la asociación ecologista Arco Iris, arrojan que el montante total entre los gastos de extinción de los incendios declarados a lo largo del ejercicio 2020 y el dinero dedicado a la restauración de territorios alcanzaría los 151,5 millones de euros en el año 2031. A ese coste económico se suman los “enormes” daños ambientales, “imposibles de cualificar”, según la asociación.

Por otra parte, el incendio originado la madrugada del domingo en Quiroga (Lugo) quedó controlado ayer, tras haber quemado 16 hectáreas.