La controversia política por la futura ley gallega de mejora de ciclo del agua sumó ayer otro desencuentro al replicar la Xunta a la denuncia formulada por la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) de que la nueva norma supondría incrementar en un 60% el recibo del agua para una familia media. La Consellería de Infraestruturas respondió que la Fegamp trabaja con “cálculos erróneos” y con una “aplicación equivocada” de las tarifas previstas para los distintos tramos de consumo.

La reacción del Ejecutivo autonómico se produce un día después de la reunión mantenida entre la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, y el presidente de la Fegamp, Alberto Varela, tras la cual los concellos advirtieron de la excesiva subida del recibo del agua debido a la ley que está preparando la Xunta y de la cual las cuatro diputaciones interpretan que invade sus competencias. La Administración autonómica asegura que en esa reunión los técnicos de Augas de Galicia ya le advirtieron a los representantes de la Fegamp de esos “errores” en sus cálculos”. La consellería explica que el anteproyecto de ley de mejora del ciclo integral del agua propone un modelo tarifario que se aplicaría “únicamente en los casos en los que los ayuntamientos decidan, voluntariamente, solicitar que la Xunta asuma la gestión de la depuradora municipal”.