Gonzalo Caballero, líder del PSdeG, mantuvo ayer una agenda repleta de actos que finalizó con un encuentro con la militancia en A Coruña, en el que defendió su continuidad en el puesto tras las primarias del 30 de octubre para construir un partido “fuerte” y “avanzar hacia el futuro y no retroceder hacia el pasado”.

De nuevo, Caballero se presentó como un cargo de las bases y, sin citarlo, vinculó a su rival, el barón coruñés Valentín González Formoso, con los poderes territoriales en Galicia. “Le corresponde a la militancia socialista decidir si quiere potenciar el futuro o si quiere retroceder”, indicó. “El futuro lo deciden los militantes y no las baronías ni los virreinatos”, añadió.

Freno al retroceso del PSdeG

Aseguró que en los últimos cuatro años el partido consiguió “frenar una década de retrocesos electorales y empezar a crecer en apoyo en todas las elecciones”, si bien igualó los 14 diputados autonómicos de 2016. “Hoy tenemos más representación y un partido con más músculo y más fuerza”, sostuvo.

“Tenemos que mantenernos en la izquierda con un planteamiento alternativo al del PP de Feijóo”, pidió a los suyos a un mes de la celebración de primarias internas para elegir al secretario xeral antes del congreso autonómico de comienzos de diciembre. Después se producirán los cónclaves en las agrupaciones municipales. Tras varios actos con militantes ayer por la mañana en Pontevedra y Lugo, y por tarde en A Coruña, Caballero continuará su recorrido por el resto de ciudades y villas con el reto de “seguir ganando dentro” para así “ganar fuera, con la ciudadanía”.