Desestiman la demanda de la aspirante a la que Navantia rechazó por su madurez

El proceso selectivo para entrar en Navantia ya llegó con protestas de los sindicatos por supuestas irregularidades. Pero la justicia está dando la razón a la empresa. Una aspirante había denunciado a la compañía, porque en las pruebas de técnico superior júnior en los astilleros de la ría de Ferrol había sido excluida por “exceso de madurez y conocimiento profesional”. Pero el titular del Juzgado de lo Social número 1 de esa ciudad ha desestimado la demanda.

Considera el juez que la candidata se presentó a unas plazas júnior y que “cobra sentido” excluir a la demandante por tener un perfil sénior o de mayor experiencia —una categoría a la que también se inscribió pero en la que no fue admitida al estimar la empresa que no cumplía con el perfil—.

La sentencia se publicó el pasado 4 de noviembre. Pero salía a la luz en los medios ayer, a través de un comunicado del sindicato CGT. Y apunta que debido a que Navantia es una empresa pública, el acceso debe de regirse “por los principios de igualdad, mérito y capacidad”, afirmación que sustenta en la legislación vigente y en sentencias del Tribunal Supremo.

A pesar de que la demandante obtuvo una de las mejores puntuaciones, estima que no puede considerarse júnior.