La Audiencia Provincial de A Coruña confirmaba ayer la condena del exalcalde de Coristanco a siete años de inhabilitación. La sentencia considera probado que Antonio Pensado autorizó a una empresa a almacenar residuos de demolición y construcción en una finca. En declaraciones a la agencia Efe, el exalcalde confirmó que presentará su dimisión como concejal.

El regidor de Coristanco con el PP, entre 1991 y 2015, explicó a Efe que aunque vaya a recurrir la decisión judicial dejará su puesto porque no quiere que quede “ninguna duda”. Afirmó que “en política hay que demostrar cada día más la seriedad, la eficacia y la honradez”.

El tribunal lo considera culpable del citado delito de prevaricación, pero lo absuelve de otro delito también de prevaricación que le imputó la Fiscalía, así como del de falsedad en documento oficial por supuestas irregularidades en la contratación de obra pública.

“Llevaban tiempo acusándome de todo y se vio una vez más, después de cuatro sentencias, que solo me inhabilitan siete años, que no me preocupa absolutamente nada”, subrayó Pensado. Sobre la autorización concedida en 2012 a la empresa del grupo Macaraná para depositar residuos en una finca, el exalcalde ha lamentado que lo condenan por dar un permiso “con la mejor voluntad del mundo” para facilitar los trabajos.

La Fiscalía llegó a reclamarle en la causa cuatro años de prisión y 36 de inhabilitación. Según la sentencia, Pensado adoptó una resolución “arbitraria y contraria a la legalidad”. La misma pena ha recaído sobre los tres hermanos administradores de la firma beneficiaria.