Galicia se ha levantado este domingo con fuertes rachas de viento, de más de 125 km/h en algunos puntos, en pleno aviso naranja por temporal en el litoral coruñés y amarillo en el resto de la comunidad. La buena noticia es que esta situación ha traído consigo la vuelta de la lluvia, una necesidad imperiosa en toda la comunidad gallega, donde se ha decretado prealerta por sequía. La no tan buena, los sustos que los soplos han provocado no solo cerca del mar, sino también en el aire: dos aviones procedentes de Sevilla y Palma de Mallorca han tenido que posponer sus aterrizajes cuando oteaban Santiago de Compostela tras comprobar cizalladura en el aeropuerto de la capital.

Los vuelos, ambos operados por Ryanair, eran concretamente el FR723 / RYR3SV y el FR3041 / RYR266D. El primero de ellos tenía su salida programada para las 9.40 horas, pero partió a las 11.20 h desde la capital balear, llegando finalmente al aeródromo Rosalía de Castro dos horas después, con 25 minutos de retraso. En el caso del segundo, partió de la capital andaluza a las 11.37 h y arribó a las 13.17 h, más de media hora después de lo previsto. Una situación de cizalladura del viento en el entorno del aeropuerto compostelano ha sido la razón de estos contratiempos que han obligado a ambas aeronaves a efectuar varios rodeos en los municipios de alrededores hasta encontrar el momento oportuno para posarse, que fue, finalmente, en el segundo intento, según han explicado los controladores aéreos desde su cuenta de Twitter.

La cizalladura del viento puede ser un elemento atmosférico peligroso. Es la segunda causa de accidentes aéreos debidos a las condiciones del tiempo, que son residuales -la primera razón es por la formación de hielo sobre la superficie de la nave-. Grosso modo, se trata de un cambio agresivo en la velocidad y/o dirección del viento a nivel de la atmósfera.

Vientos de más de 128 km/h

La comunidad gallega, que este fin de semana también ha visto caer la lluvia -sobre todo el domingo- como una bendición tras semanas de únicamente algunas gotas, registró ayer su racha de viento más fuerte en Viveiro (Lugo), concretamente en su estación de Penedo do Galo, con un valor de 128,2 km/h a las 12.20 h. El segundo mayor dato se dio en A Pontenova (también en Lugo), con 126,7 Km/h a las 15.00 h; y el tercero, en Cedeira (A Coruña): 125,3 km/h cuando eran las 10.50 h. En la provincia de Pontevedra, el guarismo más elevado se observó en Cuntis con 112,1 km/h a las 13.30 h. Desde las 18.00 h, según ha informado Metegalicia, los vientos han ido amansando, aunque regresarán este lunes.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha vuelto a activar los avisos amarillos para este lunes por vientos de fuerza 7 en el mar, lo que podrá desencadenar olas de hasta cinco metros de altura. El temporal y sus resquicios se irán disipando progresivamente hasta el miércoles.