Alberto Núñez Feijóo está cada vez más cerca de tomar las riendas del PP estatal, de cuyo liderazgo saldrá Pablo Casado tras la rebelión interna por su enfrentamiento con Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid. La oposición gallega le exigió que aclare si elige “Galicia o PP” en una estrategia para desgastarlo y posicionarse ante la nueva etapa que se abrirá en Galicia.

La salida de Feijóo rumbo a la calle Génova abre un escenario incierto en la comunidad, presidida por el de Os Peares desde 2009. Sin él, el PP perderá a su mayor activo tras 13 años de presidencialismo máximo, pero además deberá restañar el valor de su marca, afectada por la crisis estatal. Ello abre un horizonte de ilusión para BNG y PSdeG tras la cuarta mayoría absoluta popular de verano de 2020: 41 de 75 escaños.

El BNG vive su mejor momento tras obtener 19 actas, situar en los libros de historia sus rencillas internas y encomendarse al liderazgo de Ana Pontón. El PSdeG, sin embargo, inicia una nueva etapa con Valentín González Formoso, presidente de la Diputación de A Coruña, como secretario xeral desde finales de octubre y sin candidato claro para las autonómicas de 2024. Además, este se encuentra fuera del Parlamento, lo que limita su capacidad de interacción con el relevo de Feijóo en la Xunta cuando este dimita de su cargo para centrarse en el PP estatal. Compaginar ambos puestos durante meses se antoja improbable.

Este desembarco en Madrid del dirigente gallego protagonizó ayer la sesión de control en el Parlamento gallego. Una hora después de la sesión en el Congreso de los Diputados que simbolizó el adiós de Casado al liderazgo del PP, Feijóo se midió a los portavoces de BNG, Ana Pontón, y PSdeG, Luis Álvarez.

"Galicia no es la sala de espera de sus ambiciones personales”

Ana Pontón

“Es legítimo que tenga aspiraciones [a desembarcar en la política estatal], pero tiene que elegir: PP o Galicia. Galicia no es la sala de espera de sus ambiciones personales”, le afeó Pontón, con un mensaje recurrente durante años en el hemiciclo gallego por parte de los diferentes líderes de la oposición a que se ha enfrentado Feijóo desde 2009. A diferencia de años anteriores, ahora su salto es inminente.

“Le digo esto porque lleva muchas horas estos días dedicadas a intentar tapar la corrupción del PP sin atender los problemas de los gallegos”, añadió la líder nacionalista, en alusión a la entrada en escena de un Feijóo que le enseñó la puerta de salida a su jefe de filas y se posicionó al lado de Ayuso.

“Nos preocupa que esté más pendiente de los problemas de su partido que de los de Galicia. Parece haber pasado de aquel Galicia, Galicia, Galicia a Madrid, Madrid, Madrid”, espetó el socialista Luis Álvarez, en alusión al lema de Feijóo en elecciones, que llegó incluso a institucionalizar.

En el Parlamento, Feijóo se revolvió sin aclarar nada y ciñéndose al origen de las preguntas de sus rivales sobre el sistema de residencias de mayores, en el caso nacionalista, y el sector eólico, en el socialista. “Habla mucho más de Madrid que yo. Comprenderá que tras 16 años continuados hablando ustedes de Madrid, estamos cansados”, respondió el presidente de la Xunta y del PPdeG tras varios días en los que exigió a Casado acabar con el “colapso” del PP, enseñándole la puerta de salida, y avanzando su paso adelante.

Yolanda Díaz

Eso sí, en ese cara a cara, Feijóo se limitó a recordar sus mayorías absolutas. “Dice que hay que elegir entre Galicia y el PP. No, señoría, Galicia siempre eligió al PP”, le dijo a Pontón. A Álvarez le recordó que “los que se sentaban a su lado son los que están en Madrid”, en alusión a Yolanda Díaz, hoy vicepresidenta del Gobierno y que en su etapa como diputada autonómica afeó a Feijóo el posible salto a Madrid que ella dio. De hecho, en medio de la crisis del PP, Díaz anunció que en primavera lanzará su nuevo proyecto político estatal, con el que refundar el espacio político de Unidas Podemos, marca que sus propios integrantes consideran quemada. La ferrolana, por cierto, nunca militó en Podemos y hace tiempo abandonó Izquierda Unida.

A este asunto también se unió Valentín González Formoso. “El único compromiso de un presidente de la Xunta tiene que ser Galicia y no podemos permitirnos un presidente a tiempo parcial”, censuró en una visita a Cabana, donde añadió que “es importante que el PP se reconstruya”.

A pesar de ello, pidió al PSdeG centrarse en construir una alternativa: “Y no dependemos de que Feijóo se vaya o se quede, es una decisión personal, y en cualquier caso Galicia no puede quedar supeditada a esa decisión”.