Xunta y oposición se enzarzaron esta mañana en un cruce de reproches sobre las medidas para mejorar la sanidad pública y combatir la crisis de precios, que en Galicia rozan el 10%, situándose por encima de la media. El presidente del Ejecutivo, Alfonso Rueda, exigió a BNG y PSdeG que presionen al Gobierno central para contribuir a luchar contra esos problemas.

La Xunta anunció ayer incentivos económicos para que médicos de Atención Primaria elevasen su actividad, algo que el socialista Luís Álvarez criticó por no solucionar el problema. “Necesitamos un cambio”, reclamó tras asegurar que esa decisión reducirá el tiempo de atención a cada paciente.

“Si los problemas que tiene la sanidad se arreglasen solo con dinero, estarían arreglados hace mucho tiempo”, alegó Rueda antes de la reunión del Consejo Interterritorial de Salud de hoy. Galicia exige un MIR extraordinario, la creación de la especialidad de urgencias para no formar médicos de cabecera y que parte de ellos se marchen luego a este servicio, o la supresión de las tasas de reposición.

Rueda pidió al PSdeG que “presione” al Gobierno presidido por el socialista Pedro Sánchez.

Misma vía usó Rueda para rebatir las críticas de Ana Pontón, líder del BNG, pues le encomendó reclamar a su “socio” en Moncloa medidas generales para mitigar la subida de precios. “Son muy bravos con la Xunta y muy dóciles con el Gobierno”, resumió.

Pontón le afeó escudarse tras sus ataques a Moncloa para no tomar medidas como impulsar un paquete de ayudas de 700 millones para ayudar a las familias en dificultades o condicionar la expansión del sector eólico a la creación de puestos de trabajo y la protección de la actividad agraria.