Siete marineros heridos levemente en la explosión del atunero Albacora Cuatro en Seychelles que ha costado la vida a dos tripulantes han recibido el alta hospitalaria y un tripulante permanece hospitalizado con insuficiencia respiratoria, según la Organización de Productores Asociados de Grandes Atuneros Congeladores (Opagac). Opagac, patronal a la que pertenece el buque Albacora Cuatro, ha lamentado este jueves en un comunicado el fallecimiento de dos miembros españoles de su tripulación, uno de origen gallego y otro asturiano, como consecuencia de dicha explosión en Puerto Victoria, además de expresar su solidaridad y apoyo a los familiares de los fallecidos, vecinos de A Coruña.
El accidente fue causado este miércoles por una fuga de amoniaco en el sistema de refrigeración del barco mientras se realizaban tareas de reparación del atunero en el puerto de la capital de las Islas Seychelles.
Opagac ha puesto a disposición de los allegados de los marineros y de la compañía propietaria del buque (Compañía Europea de Túnidos) "todos los recursos que crean necesarios en estos momentos tan duros para tratar de paliar lo más posible el dolor" causado por este suceso.
El atunero Albacora Cuatro, construido en 1974 y reformado en 1988, opera habitualmente en aguas del Índico; este buque, de 88 metros de eslora y 16 de manga, fue secuestrado en el 2000 por piratas somalíes durante tres días.
La patronal ha valorado "la profesionalidad y el espíritu de sacrificio de los pescadores" y ha expresado la solidaridad con toda la comunidad pesquera, "consciente de la amargura que supone para toda ella, independientemente del tipo de arte o caladero en el que opere", un suceso como el ahora vivido.
