Renfe esperaba mejorar este verano sus servicios en el ámbito AVE-Larga Distancia que afecta a las conexiones entre Madrid y A Coruña, Santiago de Compostela y Vigo, con un mayor número de frecuencias, mayor oferta de plazas y reducción de tiempos de viaje en algunos recorridos. La compañía explica que encargó a Talgo la fabricación de 30 trenes de alta velocidad, 15 de ellos con ancho variable para circular por vía convencional y estándar, para lo que destinó una inversión de 786,5 millones de euros.

La empresa ferroviaria analiza el contrato de la empresa Talgo para calcular las posibles penalizaciones por el retraso en la entrega de trenes de alta velocidad S016 que debían haber sido entregados para poder entrar en servicio este verano.

La entrega de las primeras unidades estaba prevista para enero de 2021 aunque desde la empresa constructora no se ha fijado fecha de entrega definitiva, según ha comunicado Renfe en una nota de prensa.

Renfe indica que el retraso de estos trenes ha implicado que la compañía tenga que redistribuir la flota existente, hasta que lleguen los nuevos que debe entregar Talgo.