La Comisión Mixta de Transferencias Administración General del Estado-Comunidad Autónoma de Galicia acordaron ayer la cesión a la Xunta del rendimiento del Impuesto sobre el depósito de residuos en vertederos, la incineración y la coincineración de residuos con efectos desde el 1 de enero de 2023.

Se trata de la primer transferencia de competencias a la comunidad gallega de los últimos trece años, desde que Feijóo asumió la presidencia de la Xunta. Por este impuesto, la comunidad recaudará al año unos 17 millones de euros. Según la información aportada por la Xunta, esta es la cantidad estimada que la Consellería de Medio Ambiente aspira a ingresar, un impuesto que se cobra en todo el Estado, ya sea a través de las comunidades o de la Agencia Tributaria.

La Consellería de Facenda e Administración Pública ha confirmado que iniciará la tramitación de la orden que regule los aspectos de gestión y los modelos de autoliquidación.