El delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, rechazó ayer la existencia de bandas organizadas de ocupación de viviendas en la comunidad gallega, mientras que la conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, Ángeles Vázquez, ha pedido una reforma legislativa en esta materia.

“Una reforma del Código Penal, las penas tienen que ser de cárcel para okupas ilegales y una ocupación no puede ir más allá de las 48 horas desde que se detecta”, dijo la conselleira tras la reunión que mantuvo con Miñones, en las que cifró en 600 las okupaciones existentes en la comunidad.

Frente a este dato, el delegado del Gobierno en Galicia aseguró, con informes de la Policía Nacional, que no hay “ni una sola vivienda” en la comunidad en manos de “bandas organizadas” y cifró en 110 las ocupaciones.

“Tenemos que actuar con responsabilidad y rigor”, dijo Miñones, quien aseguró que estos casos suponen un “0,2% en cuanto a delitos penales” y aludió a un descenso del 7% en las ocupaciones.

“Cada caso nos preocupa”, insistió también, asegurando que la ocupación en Galicia son de “viviendas deshabitadas en las que no se conoce a los propietarios o son de entidades bancarias que no denuncian” lo que, ha añadido, dificulta la puesta en marcha de los mecanismos judiciales.

Por su parte, la conselleira ha defendido que la ley de vivienda “tiene que dar derecho a toda persona a una vivienda digna, pero no derecho a que una ocupación sea el trampolín para tener una vivienda”. “Es un problema que va a más”, expuso, cifrando en un 15% el incremento de acuerdo con los datos de la Xunta, informa Europa Press.