Los dos acusados por el accidente del tren Alvia ocurrido en julio de 2013 en Angrois, el maquinista Francisco Garzón y el ex alto cargo de Adif Andrés Cortabitarte, se enfrentarán a los interrogatorios este jueves y viernes, respectivamente, y después podrán ausentarse del juicio hasta el día de las conclusiones, según ha informado la jueza Elena Fernández Currás, al término de la primera jornada, dedicada a cuestiones previas.

Este primer día de arranque del macroproceso ha estado marcado por el dolor de las víctimas, presentes a las puertas del edificio de la Cidade da Cultura desde primera hora de la mañana, donde han reclamado justicia casi 10 años después de lo sucedido.

Minutos antes de las nueve llegaba el maquinista y poco después los presentes tenían conocimiento de que el exdirectivo de Adif ya había accedido al centro de innovación del complejo del Gaiás, pero lo había hecho por una puerta trasera.

Víctimas lamentaron lo "simbólico" de esta entrada, "sin dar la cara" y con "privilegios" con respecto al maquinista, que sí ha tenido que cruzarse con las víctimas de la tragedia que aquel 24 de julio de 2013 acabó con la vida de 80 personas.

Después de algo menos de cuatro horas de cuestiones previas --se preveían largas pero han transcurrido con más agilidad de lo esperado, entre otras cuestiones debido a las instrucciones de la jueza--, las partes han abandonado la Cidade da Cultura y en esta ocasión el ex alto cargo de Adif, Andrés Cortabitarte, lo ha hecho por la puerta principal.

Ha sido entonces cuando, seguido por un nutrido grupo de periodistas, ha afirmado con rotundidad: "En diez años (no) he hablado y no voy a hablar nunca". A continuación, y pese a que iba escoltado, el padre de una víctima le ha golpeado, lo que provocará que la Policía Nacional revise el protocolo de seguridad, según informan a Europa Press fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG).

La jueza tumba el intento de Adif de acotar la causa penal sobre Cortabitarte

La magistrada María Elena Fernández Currás ha tumbado en el inicio del juicio por el accidente de un Alvia en Santiago en 2013 el intento de Adif, empresa pública responsable del mantenimiento de la infraestructura ferroviaria, de acotar la causa penal sobre Andrés Cortabitarte, ex alto cargo de la empresa pública y uno de los acusados.

El letrado Ignacio Sánchez, que representa al ex responsable de la seguridad en la circulación en el momento del siniestro, quería que se delimitase la acusación sobre su defendido, una reclamación que apoyó la Abogacía del Estado.

Sánchez buscaba que se pusiese el foco en si el análisis de riesgos previo al siniestro que se saldó con 80 víctimas mortales y casi centenar y medio de heridos era el correcto, sin entrar en analizar las condiciones de seguridad del trayecto, librando a su patrocinado de esa responsabilidad.

Esa tentativa de delimitar, y de no relacionar con Cortabitarte la ausencia de las medidas de seguridad adecuadas, como señalización en la vía o funcionamiento del sistema ERTMS, el cual permite el frenado automático; no ha prosperado, puesto que la presidencia de la sala ha dicho que todos esos factores están "íntimamente conectados", misma opinión del fiscal Mario Piñeiro.

La jueza María Elena Fernández Currás sí ha admitido como "prueba de parte" el vídeo aportado recientemente por la defensa de Adif, que busca atribuir determinados errores al maquinista del tren, Francisco José Garzón, la otra persona que se sienta en el banquillo y que este jueves declarará.

Durante la fase de cuestiones previas, la mayoría de los abogados de las víctimas, así como el abogado del maquinista, pidieron la impugnación de este vídeo que ha sido aportado recientemente por Adif, que califican como "montaje" y que tiene "claro ánimo de exculpar al señor Cortabitarte y establecer la única responsabilidad del maquinista".

Fernández Currás ha señalado que evidentemente se trata de "una prueba de parte", que corresponde al interés legítimo de la defensa de Adif y, por ello, no ha se pronunciado sobre su valor probatorio, aunque sí que ha sembrado algunas dudas.

"Desde luego, cabe pensar todo lo que se quiera respecto de un vídeo que se aporta en el año 2022", ha expresado la jueza, tras los argumentos tanto del abogado del maquinista, Manuel Prieto; como de varias de las acusaciones particulares, entre ellas la del abogado de la Plataforma de Víctimas del Alvia 01455, Manuel Alonso, para pedir su impugnación.

"Está unido a las actuaciones, no hay problema en tenerlo admitido, sin perjuicio de su valor probatorio", ha señalado la jueza, que ha añadido que en el vídeo aparece alguien "conduciendo un tren por ese trayecto" pero que "no se sabe" ni a qué día pertenece, "ni cuándo ni quién lo grabó".

Por parte de la acusación, el abogado de algunas de las víctimas Francisco José González Losada ha señalado que el vídeo "está efectuado, después de todo el tiempo que ha pasado, en una fecha reciente" y que se desconocen "el modelo del tren y la velocidad".

"Lo único que se hace es superponer una conversación telefónica con unas vistas de frente del tren para intentar justificar sus propios argumentos", ha afirmado.

Losada ha señalado que la pieza audiovisual "no cumple con los requisitos establecidos" por la ley de enjuiciamiento y ha sembrado dudas sobre qué personas han editado ese vídeo, que, en todo caso, deberían también ser sometidas a declaración.

Sin embargo, el Abogado del Estado, Javier Suárez, que defiende a Adif, ha señalado que el vídeo aportado es tan solo "un documento gráfico explicativo" que corresponde a la "secuencia temporal que precede al accidente" y que "recoge los principales hitos" que suceden durante la llamada telefónica del maquinista.

"Es un documento gráfico explicativo, exclusivamente. No es una reproducción de lo que pasó el día del accidente", ha remarcado.

"Lo único que hemos querido es plasmar en imágenes datos que ya constan en la causa", ha añadido Suárez, que ha instado a la acusación a "contrastar o corroborar" el vídeo con los informes elaborados por la Policía Científica.

Más allá de estas cuestiones, en esta jornada inicial ha habido reparos de los abogados (hay más de un centenar personados) sobre la disposición de la sala de vistas y el hecho de que el procedimiento se retransmita en directo. La magistrada no ha visto debate alguno.