Sociedade Galega do Medio Ambiente

La “Era circular” llega al plan estratégico de Sogama

Trabaja en un nueva hoja de ruta que le permitirá pasar de tratar residuos a convertirse en una empresa generadora de recursos en el periodo 24-30

La directora general de Sogama, Mirta Sueiro, y el presidente ejecutivo de Sogama, Javier Domínguez.

La directora general de Sogama, Mirta Sueiro, y el presidente ejecutivo de Sogama, Javier Domínguez. / OPC

B.C

Evolucionar y adaptarse a los cambios exigidos por un modelo de desarrollo que tiene como epicentro la economía circular. 

Es el objetivo que ha llevado a la Sociedad Galega do Medio Ambiente (SOGAMA), no en vano considerada una de las empresas más modernas de su sector en Europa, a ponerse manos a la obra e iniciar un profundo y exhaustivo trabajo encaminado hacia el diseño y la elaboración de un nuevo plan estratégico a materializar en el período 2024-2030

¿El objetivo? Ir un paso más allá en la valorización de residuos y evolucionar así a una empresa generadora de recursos que impulse la transformación de Galicia hacia una economía próspera, moderna, competitiva, descarbonizada y respetuosa con el medio ambiente. 

En línea con los ODS

La entidad pública quiere impulsar la transformación de Galicia hacia una economía moderna, descarbonizada y respetuosa con el medio ambiente

Transcurridas tres décadas desde su creación, Sogama se prepara así para un cambio de era y toma como referencia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, el Acuerdo de París, el Pacto Verde Europeo (cuya prioridad es conseguir que Europa sea climáticamente neutra para el año 2050) y, por supuesto, la normativa europea, estatal y autonómica que rige su actividad. 

Un nuevo plan estratégico que quiere dar un gran paso hacia la sostenibilidad, entendida como el equilibrio entre la protección ambiental, el crecimiento económico y la cohesión social. 

Con todo ello, pasará de ser una empresa de tratamiento de residuos a ser una empresa generadora de recursos

En este marco, ha decidido poner en marcha un ejercicio de revisión, de planificación y de actualización estratégica que le permita anticiparse, estar a la vanguardia y contribuir a la transición de la comunidad gallega hacia una verdadera economía circular en la que los productos permanezcan el mayor tiempo posible en la economía y, una vez agotada su vida útil, se conviertan en nuevas materias primas y se reincorporen al circuito comercial.

De este modo, el plan estará marcado por líneas maestras tales como:

  • Ser referentes en valorización de residuos y economía circular,
  • Cumplimiento de los objetivos europeos,
  • Adopción del enfoque de simbiosis industrial,
  • Descarbonización de procesos,
  • Eficiencia energética,
  • Minimización de impactos ambientales,
  • Digitalización,
  • ESG, y
  • Desarrollo de talento.

Un trabajo plural e integrador

Para la elaboración del nuevo plan estratégico, Sogama va a contar contar con la visión de expertos y técnicos del sector ambiental, energético y económico, sin perder de vista las aportaciones de sus grupos de interés, especialmente con aquéllos con los interactúa de forma permanente, como es el caso de proveedores, contratistas, trabajadores, ayuntamientos, además de otros colectivos sociales a los que presta un servicio público considerado básico y esencial.

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La puesta en marcha en 2023 de la Red de infraestructuras para la gestión de la materia orgánica, impulsada por la Xunta de Galicia y ejecutada por Sogama, supone una inversión de 40 millones de euros.

El objetivo es ayudar a los ayuntamientos, que son los que tienen las competencias en materia de gestión de residuos, a cumplir la legislación vigente sobre la implantación de la recogida diferenciada de la materia orgánica a través del contenedor marrón.

De esta forma, una vez concluidas las obras, los ayuntamientos gallegos adheridos a Sogama tendrán acceso a una red compuesta por 4 infraestructuras para el tratamiento de biorresiduos y 13 plantas de transferencia, de las cuales 6 son de nueva construcción y 7 serán remodeladas.

Así, en lo que atañe a las plantas de biorresiduos, ya está en funcionamiento la ubicada en Cerceda (A Coruña) y la previsión de la Xunta es que en el primer semestre de este año estén operativas las de Cervo (Lugo) y la de Verín (Ourense). Con respecto a la planta de Vilanova de Arousa, se estima su entrada en servicio en el último trimestre de 2023. En el caso de las plantas de transferencia de apoyo, son de nueva construcción las de A Lama, Arbo, Cee, Curtis, Ponteceso y Riotorto y todas ellas estarán en funcionamiento en el segundo semestre de este año.

Por otra parte, otras 7 plantas serán reformadas para adaptarlas a los requisitos de tratamiento de estos residuos. De ellas, ya está finalizada la de San Cibrao das Viñas. Las seis restantes –A Rúa, Silleda, O Porriño, Vigo, Lugo y Narón– entrarán en funcionamiento antes de que finalice 2023.

La Xunta cumple así el objetivo de que la mayor parte de los ayuntamientos adheridos a Sogama cuenten con una planta de biorresiduos o de transferencia a menos de 50 kilómetros de distancia; circunstancia que también supondrá no solo un ahorro de costes, sino una reducción de las emisiones de CO2 al disminuir el transporte de mercancías por carretera.