El precio de la vivienda sube casi un 7% en un año y ya se lleva el 27% de los ingresos

Desde que el mercado inmobiliario se recuperó del parón y la inactividad a causa del coronavirus hasta hoy, se ha mostrado imparable. Ni la desorbitada inflación ni la subida de tipos han logrado frenar la compra de viviendas. Los precios siguen sin dar respiro debido al fuerte tirón de la demanda. Quien quiera comprar un piso en Galicia tiene que desembolsar una media de 1.213 euros por metro cuadrado, un 6,9% más que el primer trimestre del año pasado, según el informe publicado ayer por la tasadora Tinsa. Para el pago del primer año de la hipoteca, cada hogar ya tiene que destinar en la comunidad gallega el 26,7% de los ingresos familiares.

Los gallegos tienen que apretarse el cinturón más que otros territorios para embarcarse en la compra de una vivienda. El alza de los precios en Galicia se queda en el arranque del año unas décimas por encima de la experimentada en el conjunto del país (6,3%), aunque el coste medio en el mapa residencial nacional —1.713— es un 40% superior al que afronta el mercado gallego. A la cabeza del incremento en las tarifas se coloca Cantabria (12,1%), seguida de Aragón (10%), La Rioja (8%) y Extremadura (7,5%). Galicia ocupa el séptimo puesto del ranking nacional. En el extremo opuesto del mapa inmobiliario, donde ninguna comunidad registró una caída de precios en el último año, están Canarias (3,9%) y Cataluña (4,4%).

La brecha respecto a los años del boom del ladrillo se acorta cada vez más y las tarifas en la comunidad gallega se quedan un 19,3% por debajo de máximos históricos. En el caso de España, la diferencia es de un -20,8%. A la par, los precios se alejan de los valores mínimos de la crisis financiera. En Galicia, son ya un 14,6% superiores, mientras que en España las viviendas ya cuestan un 34,2% más que en los años del pinchazo de la burbuja inmobiliaria.

Provincias y capitales

De las cuatro provincias gallegas, A Coruña protagonizó en los primeros tres meses del año el mayor aumento de precios en el mercado residencial (7,4%), seguida de cerca por Ourense (7,2%). En el tercer puesto se coloca Pontevedra (6,4%) y, ya más alejada de este crecimiento cierra la tabla autonómica Lugo (2,8%).

En cuanto a las capitales de provincia, A Coruña se mantiene en el top de Galicia. Quien está planteándose adquirir una vivienda en la ciudad herculina la oferta media actual se sitúa en los 1.858 euros por metro cuadrado, un 3,3% más que el primer trimestre del año pasado. Es ya un 51% más que el coste medio en la comunidad gallega y un 8,4% que la media nacional. Hasta 500 euros más barato el metro cuadrado es en Pontevedra ciudad (1.361 euros) pero es ya un 8,1% más alto el precio que hace un año. En Ourense el precio se queda en 1.246 euros de media, casi un 4% más que en el arranque de 2022 y en Lugo se sitúa en 1.134 euros el metro cuadrado, también un 8,1% más que en 2022.

Del conjunto del país, los distritos más caros se localizan en las ciudades de Madrid y Barcelona, a gran distancia del resto de capitales. En el barrio de Salamanca, el precio roza los 5.500 euros el metro cuadrado y en el catalán de Sarrià, más de 4.800.

Desde la tasadora Tinsa destacan que el año ha comenzado con una desaceleración generalizada en el crecimiento de los precios de la vivienda terminada (nueva y usada)”. “Continúa la normalización del volumen de compraventas de viviendas, que están retornando hacia su media histórica, inferior a la fuerte aceleración de la actividad que se experimentó entre la segunda mitad de 2021 y la primera mitad de 2022, pero aún en niveles robustos”, declara la directora del Servicio de Estudios de Tinsa, Cristina Arias.

A las incertidumbres económicas de los últimos meses, según destacan desde Tinsa, se han añadido recientemente problemas en algunos bancos de Estados Unidos y, en menor medida, en Europa que abren la posibilidad a una mayor restricción de crédito por parte de las entidades financieras”.

“Esta situación podría derivar en una reducción de las previsiones de crecimiento de la economía existentes hasta la fecha, lo que afectaría negativamente a la demanda de reposición de vivienda, aunque podría ser positiva para la inversión en bienes raíces”, detalla Arias.

En la actualidad, solamente el 49% del total de las transacciones en España tiene asociada una hipoteca, lo que indica que la vivienda continúa canalizando ahorros en un entorno de incertidumbre económica.

La hipoteca en Galicia: más de 116.000 euros, una quinta parte menos que la media

En el arranque del año el euríbor se aceleró y encareció la hipoteca media en 250 euros mensuales en el conjunto del país. Quienes firmaron en el primer trimestre del año la adquisición de una vivienda en la comunidad afrontan un importe medio de 116.648 euros. Este desembolso se queda un 20% por debajo de la hipoteca media en España, que cerró el arranque del año con un importe de 145.347 euros. Las cifras en la comunidad gallega la colocan como la décima de España con el valor más bajo. Extremadura presenta las hipotecas de menor coste (88.011), seguida de Murcia (91.440), las dos únicas autonomías por debajo de los 100.000 euros. En el extremo opuesto se encuentran Baleares (233.363 euros) y Madrid (212.302). En Galicia, las provincias de Pontevedra y A Coruña, por este orden, dejan las hipotecas más altas a lo nuevos propietarios: 119.946 y 116.946 euros, respectivamente. Por debajo de la media autonómica están los contratos de compra firmados en Lugo (115.048) y Ourense (91.933). La cuota media en Galicia ya alcanza los 532 euros mensuales frente a los 648 del conjunto nacional. En cuanto a los ingresos que hay que destinar a la hipoteca, la provincia de Pontevedra está a la cabeza en Galicia (29,4%), seguida de A Coruña (25,5%). En Ourense se destina el 2,2% del sueldo y en Lugo, el 21,8%.

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