La declaración del conductor del accidente mortal de Xove, clave tras salir de la UCI

El joven ha sido trasladado a planta, donde tendrá que seguir con tratamiento por las graves lesiones. Todavía no hay fecha fijada para tomarle testimonio sobre lo ocurrido el 1 de abril

Estado en el que quedó el vehículo tras el accidente mortal en Xove. |   // EMILIO PÉREZ

Estado en el que quedó el vehículo tras el accidente mortal en Xove. | // EMILIO PÉREZ / R. Prieto

Su testimonio será clave en la investigación del accidente de tráfico mortal en el que cuatro jóvenes fallecieron el pasado 1 de abril cuando regresaban de una noche de fiesta en la localidad lucense de Xove. Tras mes y medio ingresado en la UCI, el conductor, de 19 años, ha sido trasladado a planta del hospital Lucus Augusti de Lugo. Debido a las graves lesiones sufridas tras la salida de vía del vehículo, que acabó colisionando con un poste y despeñándose por una altura de entre tres u cuatro metros, tiene que seguir recibiendo tratamiento. La Guardia Civil el Juzgado número 2 de Viveiro, en el que recayó la causa, estaban a la espera de que la condición médica del joven que iba al volante del Citroën C4 mejorase para tomarle declaración, pero por el momento todavía no se ha fijado una fecha para la citación.

Además de investigar al conductor, que dio positivo en alcohol en las pruebas médicas requeridas por el juzgado al centro hospitalario en el que permanece ingresado, la Guardia Civil procedió a abrir diligencias contra el otro superviviente, que resultó herido leve. Este sexto ocupante, de 18 años y que viajaba con cinturón de seguridad en los asientos traseros, es investigado por un delito de omisión de socorro tras haberse ausentado durante unas tres horas del lugar del accidente —desde que se produjo la salida de vía sobre las seis y media de la mañana hasta que un vecino alertó a emergencias— “sin socorrer a los otros ocupantes del vehículo ni demandar auxilio”. El chico regresó al lugar del siniestro desorientado cuando los equipos de emergencias trabajaban para recuperar los cuerpos de los cuatro fallecidos y estabilizar las constantes vitales del conductor.

“El delito investigado se encuentra tipificado en el artículo 195 del vigente Código Penal y puede acarrear una pena de multa de tres a doce meses”, precisó la Guardia Civil. De la investigación del accidente se ha hecho cargo el Equipo de Atestados e Informes de la Guardia Civil de Tráfico de Burela, que continúa con las pesquisas para determinar “las circunstancias concurrentes en el siniestro”.

Tras el accidente, el Juzgado de instrucción número 2 de Viveiro, en funciones de guardia, abrió diligencias y autorizó la remisión de muestras de sangre a un laboratorio, que arrojaron un resultado positivo de alcohol en el conductor. El juzgado informó en su día de que estaba a la espera de la salida de la UCI para tomar declaración al conductor, una diligencia de la que por ahora no ha trascendido más información.

El grupo de amigos, de entre 17 y 19 años, regresaba de un viernes de fiesta en Xove. Finalizada la verbena los seis chavales, todos de Ribadeo, a una hora del lugar donde ocurrió el accidente mortal, se desplazaron rumbo a la urbanización de Palmeiro, a escasos dos kilómetros de donde habían estado de fiesta. En ese bloque de viviendas, dos de los ocupantes, el conductor y el joven herido leve, tenían un piso en alquiler ya que estudiaban un ciclo de Informática en el municipio lucense. Por causas que la investigación trata de esclarecer, el vehículo se salió de la vía en una curva cerrada, chocó contra un poste de la luz y acabó despeñándose por una altura de entre tres y cuatro metros para terminar en una finca privada. El estado del techo del coche confirma que dio una o varias vueltas de campana antes de quedar parado sobre el prado. Sobre la carretera no había huellas de frenada.

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