Baltar delinquió en el coche oficial: condenado por ir a más de 200 km/h
Multa y un año sin conducir para el senador del PP y expresidente de la Diputación | PSOE y BNG exigen su cese, pero Rueda no pedirá su dimisión: el PP se limita a que cumpla el fallo
J. Fraiz
Tras el adiós a 33 años de baltarismo, entre los 22 del padre y los 11 años del hijo en el cargo, el Supremo resuelve, con una condena contra la que no cabe recurso, el exceso de velocidad que aceleró la marcha de José Manuel Baltar de Ourense. El domingo 23 de abril de 2023, cuando el actual senador del PPdeG aún era el presidente de la Diputación, fue detectado por un radar de la Guardia Civil cuando circulaba a «al menos» 204 kilómetros por hora por la A-52, por el municipio de Asturianos, Zamora, en el kilómetro 66,9 de la autovía. Conducía un Volkswagen Passat, un coche oficial de la Diputación. El límite máximo en ese tramo era el genérico para las vías de alta capacidad, 120 km/h. El alto tribunal considera que Baltar es responsable de un delito contra la seguridad vial. Le impone un año y un día de privación del derecho a conducir, más una multa de 1.800 euros, a la que se descontará el importe que ya abonó en vía administrativa.
Aquel comportamiento al volante del político marcó la campaña de las municipales de mayo de 2023, pero no apartó a Baltar de la carrera por repetir al frente de la Diputación. Fueron las urnas, con un resultado electoral insuficiente —por segunda vez en cuatro años, no alcanzó la mayoría absoluta para retener el poder sin necesidad de otros partidos—, las que apuraron la caída de la saga familiar tras tres décadas. Cerrado el relevo en el PP de Ourense con el ascenso de Luis Menor y elegido Baltar como senador por designación automática, el proceso se derivó al Supremo, la instancia judicial para los aforados. Se trata de una causa especial que, a diferencia de lo que sucedería con otros ciudadanos, cierra el procedimiento penal por un delito vial en una única sentencia, sin opción de recurso. La condena a Baltar ya es definitiva.
El Supremo no comparte la línea de defensa. El senador ourensano y su abogado esgrimían que el asunto ya se había saldado con un pago administrativo. El expresidente provincial aseguró que nunca condujo a más de 200 km/h, el umbral entre la sanción administrativa y el delito en una autovía o autopista. También manifestó que ningún guardia lo avisó de que podía haber incurrido en delito.
Pero la Sala de lo Penal del Supremo afirma que la cifra de 215 km/h que captó el radar, a las 18.43 horas del 23 de abril de 2023, «constituye un dato incuestionable que arrojaba el cinemómetro». Con el margen de error del 5% aplicable en este caso —es el cálculo para los radares estáticos como el de este atestado, que estaba instalado en un trípode—, la velocidad de paso era, como mínimo, de 204 km/h. «Si el aparato de medición es empleado desde una ubicación fija, esto es, sin movimiento (...) el margen de error es del 5 %. De modo que el acusado circulaba, al menos, a 204 km/h», expone el Supremo en la sentencia.
El abogado de Baltar aludió en el juicio a los supuestos «errores» y las «contradicciones» de la Guardia Civil. Creía que se habían vulnerado los derechos del político, y que la velocidad real no había pasado de 199 km/h. Aseguró que el atestado que dio pie a la causa penal fue «modificado» en varias ocasiones para «alterar» la velocidad. El Supremo considera que «las dudas iniciales de los agentes, que no contaban con el preciso margen de error, no puede servir para bloquear lo que es una verdad incontestable, que circulaba a más de 200 km/h por la autovía, limitada a 12o». El alto tribunal añade que los guardias «actuaron siempre con diligencia; primero, por no contar con todos los datos, a favor del administrado; y después, despejada la duda, solo dos días más tarde, se confeccionó un completo atestado con todas las circunstancias fácticas concurrentes». Los magistrados rechazan la pretensión de la defensa que solicitaba la absolución de Baltar por el pago previo de una sanción.
Reacciones políticas
El presidente de la Xunta y del PPdeG, Alfonso Rueda, sostiene que no pedirá a Baltar que deje el cargo de senador por designación autonómica, pese a su condena. Baltar es el presidente de la Comisión de Despoblación y Reto Demográfico de la Cámara Alta, una designación que supone un plus salarial de casi 24.000 euros al año.
Rueda cree que solo le corresponde «cumplir la sentencia, como cualquier persona que se somete a la justicia». Los estatutos del PP «no determinan que, en una condena de este tipo, el partido tenga que exigir o sea obligatorio dejar el cargo», indica Rueda. El líder nacional y expresidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, no aclaró si se tomarán medidas disciplinarias. Baltar debe «cumplir la sentencia desde la A hasta la Z, como cualquier otro conductor».
En cambio, PSOE y BNG exigen al PP que pida a Baltar la entrega de su acta en la Cámara Alta. «Un senador debe ser una persona que dé ejemplo a la ciudadanía, y no alguien que ponga en riesgo sus vidas», expresa el socialista ourensano Rafael Rodríguez Villarino, que también es senador.
El BNG solicita al Parlamento de Galicia la reprobación de Baltar y su dimisión como representante en el Senado por designación autonómica. La ourensana Noa Presas critica la «poca ejemplaridad» del expresidente provincial, por mentir sobre la velocidad, además de afearle que «aún hoy oculta detalles sobre el uso privado de un vehículo de la Diputación».
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