El PSdeG asume el argumentario de Óscar Puente y aparca el traspaso de la AP-9

El partido que dirige Besteiro propone la vía catalana y que Galicia recaude y gestione más impuestos estatales

Obdulia Taboadela, por la izquierda, Patricia Otero, Xulio Torrado, Silvia Fraga, Carmen Rodríguez y Aitor Bouza, ayer. |  L. O.

Obdulia Taboadela, por la izquierda, Patricia Otero, Xulio Torrado, Silvia Fraga, Carmen Rodríguez y Aitor Bouza, ayer. | L. O.

Daniel Domínguez

El PSdeG afronta su próximo congreso que entronizará de nuevo sin oposición a José Ramón Gómez Besteiro como secretario xeral con la tarea de revitalizarse y superar el peor momento de su historia, tras el batacazo de las elecciones autonómicas del año pasado, en las que solo obtuvo 9 diputados, cinco menos que en 2020 y 2016.

Para ello, su hoja de ruta política apuesta por algunas de las banderas clásicas del partido, como el feminismo, la igualdad y la defensa de los derechos del colectivo LGTBI, y apunta hacia algunas medidas tomadas por el Gobierno central de Pedro Sánchez, incluso a costa de defender un traspaso de la AP-9 a Galicia que Moncloa ha vetado de momento. Ahora matizan esa demanda y la aparcan hasta que el Ejecutivo rescate la vía de manos privadas. «Revertir el orden de los objetivos podría llevar a un costoso proceso para las arcas públicas que terminaría con la titularidad en Galicia, pero con empresas concesionarias y peajes aún activos», alega.

La AP-9 se les atraganta a los partidos gallegos con dependencia estatal. Tanto PP como PSdeG han votado en numerosas ocasiones a favor del traspaso, pero cuando han gobernado Moncloa han frenado esas aspiraciones. El ministro Óscar Puente incluso cifró en 6.000 millones el coste del rescate.

El PSdeG se fija como objetivos la gratuidad, el rescate y la transferencia por ese orden, según figura en el relatorio político que marcará el rumbo de la formación a partir del congreso previsto el fin de semana del 8 de marzo.

En la cuestión relativa a la principal vía de comunicación de Galicia, cuya concesión expira en 2048 tras la ampliación del Gobierno de Aznar a comienzos del milenio, los socialistas sacan pecho de ser el único partido que votó a favor de bonificaciones que llegarán al 75% de los peajes este año, lo que sitúa a los gallegos «camino de la gratuidad», si bien se trata de pagos en sombra a la concesionario y descuentos solo para viajeros recurrentes.

A partir de ahí, los socialistas gallegos creen llegado el momento de «formular de manera sensata y razonable las posibilidades para que la AP-9 abandone el formato de concesión», rescatándola para el erario público. Si se consigue, «será el momento de transitar hacia la transferencia para que la titularidad pase a ser autonómica».

El documento, presentado ayer por el portavoz de la ejecutiva, Xulio Torrado, y varios de los integrantes del comité redactor, también aboga por seguir la senda catalana y que la Xunta logre mayor parte de la tarta impositiva estatal. «Las comunidades deben participar en mayor medida en la gestión y recaudación de los impuestos que nutren sus arcas», recoge la primera versión del relatorio político, abierto ahora a las aportaciones de la militancia de cara al congreso previsto el fin de semana del 8 de marzo.

Esta cuestión ha centrado gran parte de la agenda política de los últimos meses, pues PSC y ERC firmaron un acuerdo para que la Generalitat catalana recaudase y gestionase el 100% de los impuestos estatales.

El PSdeG también defiende la exclusividad de médicos de la sanidad pública en caso de ostentar cargos como jefes de servicio, en sintonía con el Ministerio de Sanidad, y plasma la promesa de Besteiro de un plan para garantizar cita con el médico de familia en un máximo de 48 horas.

También defiende la transición energética y una compañía pública para impulsar el sector.

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