Rueda ante las críticas al informe sobre Altri: «Se está masacrando a los técnicos»
El BNG lo tacha de «escándalo» y el PSOE evita pronunciarse sobre filtraciones

Manifestación en contra de Altri ayer en Palas. | Eliseo Trigo
P. P.
El presidente de la Xunta salió ayer en defensa del informe favorable por parte de Augas de Galicia a la fábrica de celulosa de Altri en Palas de Rei (Lugo), documento que se filtró a la prensa y que ha valido una dura reprobación desde las filas del Bloque, que no duda en calificar esta autorización como «un ejemplo de libro de corrupción ambiental» por basarse en criterios políticos y no técnicos. Ante estas acusaciones, Alfonso Rueda reprochó que esté «masacrando» a los técnicos, con «descalificaciones descarnadas y absolutamente injustas contra profesionales independientes».
El informe de Augas de Galicia —adscrito a la Consellería de Medio Ambiente—, concluye que la planta de Altri cumple con los requisitos medioambientales y que es «compatible» con la calidad del agua del río Ulla.
En su comparecencia tras el Consello, Rueda precisó que este es un «informe importante», pero que la evaluación por parte del Gobierno gallego «aún tiene que seguir su recorrido» y «el futuro de Altri y su viabilidad final dependerá de que todos los informes sean positivos».
Para el presidente, las críticas a la autorización son «bastante intolerables», sobre todo porque todavía no se conoce su contenido en detalle y la actitud del BNG «es su manera de reaccionar cuando no les gustan los informes». También está convencido de que «si el BNG hubiese ganado las elecciones sería su proyecto estrella», pero como las perdió cambiaron de opinión «con la misma objetividad con la que ahora están hablando», sostuvo.
El BNG insistió ayer en sus reproches por estar ante «acontecimientos extraordinariamente graves y preocupantes», en relación a la forma en que la Xunta optó por dar a conocer el informe. «Para más burla, dicen que va a servir esta autorización para mejorar el estado de las aguas del embalse de Portodemouros. Es un insulto a la inteligencia de los gallegos», censuró el nacionalista Luís Bará. «Es un escándalo que se autorice —el proyecto— en estas circunstancias y en esta parte concreta del río», concluyó.
Por su parte, el PSOE no se pronunciará sobre el citado informe hasta que conozca el documento oficial.
Durante el acto de la apertura de tramo de la A-54 en Palas por parte del ministro de Transportes, Óscar Puente, una veintena de personas se concentró tras pancartas de Altri non y al grito de «A auga é nosa e non da celulosa», contra el proyecto de Greenfiber —empresa del grupo portugués Altri— para abrir una fábrica de lyocell —una fibra semisintética ecológica— en la localidad lucense con madera de bosques gallegos y que tramita la Xunta.
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