Rueda reclama en Bruselas una mayor descentralización de los fondos de la UE

En nombre de las 17 comunidades autónomas, reivindica más protagonismo para las regiones en la gestión: que la asuma toda el Estado no significa más eficiencia ni agilidad

Rueda, ayer con el vicepresidente de la CE responsable de Cohesión, Raffaele Fitto. |  Sara Morato

Rueda, ayer con el vicepresidente de la CE responsable de Cohesión, Raffaele Fitto. | Sara Morato

X. A. Taboada

Santiago

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, intervino ayer en el pleno del Comité de las Regiones (CdR) celebrado en Bruselas, pero con la responsabilidad de hablar en nombre de las 17 comunidades autónomas para exponer una reivindicación consensuada contra la tentación de la UE de caminar hacia una recentralización en la gestión de los fondos europeos. La propuesta está encima de la mesa, pendiente de discusión, para ir hacia un nuevo diseño de las políticas comunitarias en un momento de incertidumbre política mundial donde coge peso la idea de reforzar el presupuesto en defensa, lo que se haría a costa de incrementar la aportación de los Estados o de detraer recursos de otras partidas.

Consciente de la inestabilidad política por el nuevo escenario que se abre en Ucrania y de que pueden surgir otras prioridades —militares—, Rueda defendió la importancia de los fondos de cohesión y reclamó una gobernanza descentralizada, así como reforzar el papel de las comunidades autónomas y de las entidades locales en la gestión de los fondos y de los programas regionales. «Queremos asumir un papel protagonista en la nueva era que se abre ante nosotros», resumió, tras ser elegido como uno de los vicepresidentes del CdR.

El presidente gallego puso en valor la importancia de la política de cohesión en Europa a lo largo de las últimas décadas y reivindicó que, lejos de dejarla de lado, en un contexto en el que se dan «mayores incertezas internas y externas», se apueste por lo que ha contribuido a hacer «grande» a la UE.

Asumió como prioridades la apuesta por la simplificación y la flexibilidad en la administración de los fondos europeos, pues las comunidades autónomas creen que hay margen de mejora con respecto al actual modelo, pero lanzó la alerta de que esto no debe llevar a una recentralización de la gestión en los Estados, convencido de que no se traduce «nunca en más agilidad ni eficiencia».

En caso de que la UE vaya por esa senda propuesta por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, la Xunta podría dejar de gestionar 3.700 millones de euros en siete años, que pasarían a manos del Gobierno central, según los cálculos de la Consellería de Facenda.

Al concluir su intervención, Alfonso Rueda entregó el documento consensuado de las comunidades autónomas al vicepresidente de la Comisión Europea responsable de Cohesión y Reformas, Raffaele Fitto, quien prometió que «involucrará» a las autoridades regionales y locales en el diseño de las políticas europeas, así como que tendrán «voz» en la reflexión sobre la futura Política de Cohesión. Pero no fue más allá de comprometerse a tener en cuenta su criterio y a que participen en la fase de discusión.

Fitto defendió, a pesar de que la Comisión Europea avanza en una reforma profunda del presupuesto hacia una recentralización tras el modelo ensayado durante la pandemia del COVID, que «la voz de las regiones y los territorios» es «crucial» para una Europa que «se enfrenta a retos importantes y sin precedentes».

A Kadis: «Europa debe exigir a los que venden pescado aquí lo que pide a nuestros pescadores»

La visita de Alfonso Rueda a Bruselas incluyó en su agenda dos encuentros claves. Con el comisario de Pesca, Costas Kadis, y la vicepresidenta de Transición Limpia, Justa y Competitiva, Teresa Ribera. Al primero, le demandó «reglas de juego iguales para todos». «Lo que se nos exige a nosotros, se les debe exigir también a quienes quieren vender pescado en Europa», declaró Rueda. El presidente de la Xunta lanzaba esta mensaje después de que Kadis avalara «la lucha» de China contra la pesca ilegal y descartase cualquier sanción, cuando múltiples administraciones gubernamentales y ONG señalan al gigante asiático por depredar recursos marinos en todo el mundo. Rueda, acompañado del conselleiro de Mar, Alfonso Villares, mostró su preocupación por el acuerdo de libre comercio que Europa negocia con Tailandia. El miércoles, el Parlamento gallego pedía la exclusión del atún de este acuerdo porque este país tampoco cumple los estándares comunitarios ni lucha contra la pesca ilegal. En su entrevista con Teresa Ribera, Rueda, que estuvo acompañado de la titular de Economía, María Jesús Lorenzana, defendió «la absoluta rigurosidad» con que la Xunta tramita la evaluación de impacto ambiental de los proyectos industriales que debe autorizar. En velada alusión a Altri, que pide fondos europeos para su instalación en Palas de Rei, aseguró que Bruselas «puede tener la tranquilidad» de que si un plan industrial recibe luz verde de la Xunta es porque «es un proyecto absolutamente viable y respetuoso con el medio ambiente». Con Ribera también abordó la paralización judicial de proyectos eólicos en la comunidad y le pidió que Galicia sea «territorio estratégico para las grandes redes de transporte en Europa», i citó el Corredor Atlántico de Mercancías y la red de hidroductos europeos.

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