Nueve mil parejas ante notario: bodas rápidas, divorcios ágiles

En la última década, la forma en que los gallegos contraen matrimonio ha cambiado notablemente. Al descenso de las bodas religiosas en los últimos veinte años a cifras más anecdóticas —los que pasan por el altar se redujeron a un tercio en solo diez años, desde 2012— y a una tendencia decreciente, también, de enlaces civiles, se suma otro factor en la ecuación. Las bodas en notaría han ido despuntando progresivamente. Hasta 20 parejas optaron por casarse ante notario el año 2015, tras la aprobación en julio de dicho año de la Ley de Jurisdicción Voluntaria que, entre otros aspectos, amplió las competencias del Notariado a la celebración de bodas y la tramitación de separaciones y divorcios. Mientras, en 2024 la cifra alcanzaba los 924. En total, 4.387 gallegos han elegido esta vía desde 2015; un crecimiento exponencial al amparo de la facilidad de las gestiones.

El aumento se ha dado en todas las provincias. A Coruña encabeza la lista con 2.071 matrimonios en estos diez años (de 2015 a 2024), seguida de Pontevedra (1.385), Lugo (676) y Ourense (255), más rezagada en este tipo de uniones en notaría, según los últimos datos del Colegio Notarial de Galicia.

Además, desde abril de 2021, el expediente matrimonial puede tramitarse por vía notarial sin necesidad de acudir al Registro Civil, lo que agiliza significativamente el proceso. Se trata de los documentos que certifican que los futuros cónyuges cumplen con los requisitos legales para casarse y de los que ya se han gestionado 800 en nuestra comunidad, vía notarías.

Como explica el decano del Colegio Notarial de Galicia, José María Graíño Ordóñez, «los notarios asesoran a las parejas sobre el régimen económico del matrimonio y otros aspectos legales, ofreciendo una comunicación directa y cercana con los contrayentes». El Colegio también destaca que esta rapidez y flexibilidad del trámite es una de las razones del incremento de matrimonios ante notario.

Solo de acuerdo y sin hijos

De forma paralela al crecimiento de los matrimonios, las separaciones y divorcios ante notario también han aumentado. Tanto es así que al comparar la cifra total, salen ganando. En 2015 se registraron solo 108 separaciones y divorcios en notarías gallegas, mientras que en 2024 la cifra llegó a 727.

Pero al estimar la cifra de la última década, hasta 5.062 gallegos han optado por esta vía, lo que indica una preferencia creciente por la rapidez y sencillez que ofrece esta opción en comparación con los procedimientos judiciales. Sin embargo, «este trámite solo es posible si ambas partes están de acuerdo y no tienen hijos menores de edad o personas con capacidad modificada judicialmente a su cargo», añade el decano de los notarios. Antes de formalizar el divorcio, el notario deberá de verificar que el convenio regulador sea equitativo y no perjudique a ninguno de los cónyuges.

Graíño: «En notaría, el matrimonio puede gestionarse en un solo día»

El decano del Colegio Notarial de Galicia, José María Graíño Ordóñez, señala que en el caso de los divorcios, recalca que solo pueden realizarse si no hay hijos menores de edad o personas con capacidad modificada judicialmente a cargo. Además, es imprescindible contar con un abogado y presentar un convenio regulador.

Graíño Ordóñez también destaca que una de las principales ventajas del matrimonio ante notario «es la rapidez del trámite en comparación con el Registro Civil, donde en ciudades con alta demanda las listas de espera pueden extenderse durante meses o un año». «En cambio, en una notaría el proceso es ágil y eficiente, incluso en un solo día». También, el asesoramiento personalizado que ofrecen los notarios sobre el régimen económico, la posibilidad de otorgar capitulaciones matrimoniales o la conveniencia de redactar otros documentos legales como testamento, clave para gestionar su patrimonio y futuro.