La falta de sustitutos para las vacantes obliga a redoblar turnos en residencias

Política Social pagará entre 75 y 355 euros por cada jornada extra para suplir estas ausencias, sean imprevistas o por vacaciones

La medida afecta a todos los centros de servicios sociales

Una trabajadora de una residencia acompañando a una persona mayor. |  L. O.

Una trabajadora de una residencia acompañando a una persona mayor. | L. O.

Paula Pérez

Santiago

El déficit de médicos de familia no es el único al que debe hacer frente la Administración autonómica. También escasean trabajadores en los servicios sociales. Cada vez son más las dificultades que tiene la Consellería de Política Social para cubrir las ausencias que se producen en sus centros, bien sean imprevistas o por permisos o vacaciones programadas. Para no dejar desatendido el servicio el departamento de Fabiola García implantará una figura, que ya funciona en el Sergas: las intersustituciones. Consiste en que los profesionales que están en plantilla cubran las vacantes redoblando turnos. Como compensación cobrarán un plus económico que oscilará entre los 75 y los 355 euros, según la propuesta de la consellería remitida a los sindicatos.

«Es novedoso en el ámbito de Política Social pero ya se empleaba en otros ámbitos de la Xunta. Es una fórmula que permite la cobertura ágil e inmediata de ausencias puntuales por causas imprevistas, que implican que el empleado público no puede realizar puntualmente su turno de trabajo, lo que provocaría una imposibilidad de la prestación asistencial», explican desde el departamento de Fabiola García. Sin embargo, esta propuesta se ha encontrado con el rechazo frontal de sindicatos como CSIF que critican que se imponga «la obligatoriedad» de estas intersustituciones para suplir el déficit de personal que existe en los centros.

Listas de contratación

El problema, según explica Montse Casal de CSIF, es que «faltan candidatos en las listas de contratación» de manera que cuando se produce una ausencia la Xunta no encuentra profesionales para cubrirla. Una de las razones que esgrime es que las listas para buscar sustitutos son de ámbito provincial. «Si vives en Santiago y te sale una vacante de un día para cubrir en A Pobra do Caramiñal ¿te puedes desplazar allí de repente? Estos contratos no son atractivos y la gente los rechaza», explica Casal que defiende que habría que acotarlos a ámbitos geográficos más reducidos como las áreas sanitarias del Sergas.

Esta falta de personal se ha agravado, según advierte CSIF, en los últimos años. Hasta ahora si faltaba un trabajador sus compañeros ya intentaban suplirlo con horas extra y a cambio eran compensados con tiempo de descanso.

La propuesta de Política Social es habilitar las intersustituciones y pagar por estos turnos extraordinarios. «Esta compensación económica aún no está implantada pues está en negociación con las organizaciones sindicales», explican en la consellería.

Tipos de intersustituciones

Según su propuesta, habría dos tipos de intersustituciones. Por un lado, están las urgentes e inmediatas que serán aquellas que se hagan para suplir una ausencia imprevista. Pero también se podrá recurrir a esta figura para cubrir vacantes provocadas por vacaciones o por descansos del personal.

La Consellería de Política Social identifica ya trece centros, la mayoría residencias de mayores, donde estas intersustituciones son necesarias por falta de personal, pero CSIF advierte que son muchos más los afectados.

Las compensaciones económicas, que aún están en negociación, varían según la categoría del trabajador, de si es para suplir una baja imprevista o ordinaria y del tipo de turno que se cubre (diurno, nocturno, en día laborable o festivo) y oscilan entre los 75 euros para una jornada ordinaria de día en una intersustitución ordinaria o los 355 euros si es una incorporación urgente para cubrir una jornada de noche en un día de especial significación como el 24 o el 25 de diciembre. El departamento de Política Social estipula que «en la medida de lo posible no se realizarán mas de 12 turnos de intersustitución al año».

Para CSIF el problema reside en que la Xunta quiere obligar a hacer estas sustituciones a todo el personal. «Eso supondría que los trabajadores de los centros tendrían que tener total disponibilidad para cubrir esos turnos cuando sea necesario y eso no lo vamos a aceptar porque además es contrario a la conciliación y la mayor parte de la plantilla son mujeres que tienen a su cargo a mayores o hijos», señala Montse Casal.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents