"A lo largo de todo el itinerario que siguieron los atracadores, los vecinos fueron llamando a la Policía para dar todos los datos", apuntó en declaraciones a Europa Press y añadió que "gracias a ellos se puedo abortar una operación que podría haber sido grave".

Por otra parte, Sacristán tranquilizó a la población al asegurar que tanto la Policía como la Guardia Civil están haciendo todo lo posible" por encontrar al atracador que se fugó, al que ya tienen "completamente identificado".

Sobre las 8.45 horas dos hombres procedentes de Vigo trataron de atracar una sucursal de Caixanova ubicada en la localidad coruñesa de O Burgo. Una llamada de un vecino alertando de la presencia de estos dos individuos "rondando la zona con guantes de látex", permitió que se personaran dos agentes de la Policía Local.

En ese momento, los dos atracadores se disponían a salir de la entidad bancaria en dirección al Paseo Marítimo y, al percatarse de la presencia de los agentes, uno de ellos comenzó a disparar, hiriendo en la rodilla a uno de los agentes y al otro atracador.

DISPAROS POR "RABIA"

"El atracador ya había disparado en el interior de la oficina a la cámara de seguridad y también a la pared como signo de rabia al ver que apenas había dinero", explicó el alcalde.

El agente herido recibió varios puntos de sutura en Hospital Juan Canalejo de A Coruña tras serle limpiada la herida de bala que presentaba en una pierna, ya que tenía metralla.

Por su parte, el atracador herido se encuentra en cuidados intensivos "debido a la sangre que ha perdido", al presentar seis heridas de bala en una pierna, por lo que fue operado.

El importe exacto del botín se desconoce pero Sacristán aseguró que "fue prácticamente nada" y que lo que se llevaron "eran monedas que fueron perdiendo por el camino".