La portavoz de la Plataforma de Vecinos O Cruceiro de Meha --la parroquia en la que está ubicada la planta regasificadora--, Luz Marina Torrente, aseguró a Europa Press que el encierro en el Ayuntamiento de Mugardos continúa con carácter "indefinido", de forma que no piensan abandonar las dependencias municipales aunque mañana serán recibidos por representantes de la Dirección Xeral de Protección Civil.

Al respecto, recordó que aún está pendiente la respuesta por parte del director del área de Industria y Energía de A Coruña, a quien también solicitaron una entrevista sobre el Plan de Emergencia Exterior aprobado para Reganosa. En cualquier caso, subrayó que, tras recibir las explicaciones oportunas por parte de la Administración, consultarán con técnicos la situación y tomarán una decisión en asamblea, por lo que de momento no se plantean una fecha para finalizar el encierro.

Luz Marina Torrente indicó que durante la jornada de hoy hay en torno a 60 personas en la Casa Consistorial y destacó las adhesiones que han recibido por parte del Comité Cidadán de Emerxencia de Ferrol --promotor de las principales protestas contra Reganosa--, Izquierda Unidad o las cofradías de pescadores de Mugardos y Ferrol, así como otros a título individual como la actriz Mabel Rivera y agregó que hay otras personas que les manifiestan su solidaridad con iniciativas como llevarles comida.

PLAN DE EMERGENCIAS

La portavoz de la Plataforma de Vecinos O Cruceiro de Meha argumentó que a una empresa se le pide un plan de emergencias porque "es potencialmente peligrosa". Al respecto, añadió que en Galicia hay 11 empresas a las que se les exige este trámite obligatorio, y que dos de ellas están en Mugardos: Reganosa y Forestal del Atlántico, ambas participadas por Roberto Tojeiro. "No es casualidad, se han primado los intereses económicos", criticó.

Los vecinos critican que desconocen los detalles del Plan de Emergencia Exterior aprobado el pasado 19 de julio por el Consello de la Xunta. Este programa establece un perímetro de seguridad de 400 metros en torno a la regasificadora, en un espacio en el que el colectivo vecinal afirma que viven 184 personas en 73 viviendas.