La Xunta descarta decretar la caducidad de la concesión del embalse de A Capela a la empresa Endesa Generación SA tal y como exige la Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galiza (Adega) tras conocer el proyecto de modernización de los desagües de la presa.

La Consellería de Medio Ambiente explica que esta iniciativa de la empresa responde a un requerimiento que le trasladó en enero del pasado año en el que le obliga a restituir el caudal ecológico en el tramo del río Eume, de 3,4 kilómetros de extensión, que se encuentra desecado en las inmediaciones del embalse de A Capela desde hace 51 años.

Debido a que, por el momento, Medio Ambiente considera que Endesa responde a sus exigencias con la presentación del proyecto para reabrir los dos desaguaderos del pantano, la Xunta no se plantea tomar las medidas que reclama la asociación ecologista, que propone también exigir a la entidad energética el derribo de la presa de A Capela.

"En estos momentos el proyecto se encuentra en la fase de tramitación ambiental, en la que se analizará la viabilidad ambiental de las obras que se pretenden llevar a cabo", puntualizan desde la Consellería de Medio Ambiente.

Con un presupuesto de 5.784.653 euros y un plazo de ejecución de 51 semanas y media, Endesa propone retirar 1.500 metros cúbicos de sedimentos depositados en las inmediaciones de la toma de los desagües de la presa que quiere modernizar a través de un sistema de aspiración por bombas para, después, reubicarlos aguas arriba a una distancia de 50 metros.

Pese a asegurar que esta opción para efectuar los trabajos es la menos dañina para el medio ambiente, la energética admite posibles daños en el río Eume y en el embalse derivados de la limpieza de los "sedimentos acumulados en los desagües, posibles vertidos y derrames accidentales de sustancias contaminantes (...) y riesgo de enturbiamiento de las aguas". Todo ello afectará la calidad del agua así como a las comunidad biológica del río.

El proyecto apunta también a daños en la ría de Ares similares a los citados en el Eume y a una posible afección negativa sobre la fauna de la ribera, particularmente a los mamíferos y a las aves que necesitan introducirse en el agua para alimentarse.

Dos asociaciones ecologistas, AEMS Ríos con vida y Adega, rechazan estos trabajos y acusan a la empresa eléctrica de tratar de esquivar sus responsabilidades legales vertiendo lodos tóxicos acumulados durante cincuenta años a las aguas del Eume. El Ayuntamiento de Pontedeume, por su parte, solicitará información sobre esta iniciativa de la Endesa Generación SA, que fue denunciada el pasado año por la Fiscalía de Medio Ambiente por daños al medio ambiente.