La última Junta de Gobierno de Arteixo aprobó la peatonalización de cinco calles en el centro urbano, con un presupuesto de 225.000 euros. Las obras no se harán esperar y comenzarán en el mes de diciembre, según asegura el Ejecutivo local, que defiende la actuación para "potenciar el comercio del Concello, una de las grandes fuentes de empleo de Arteixo".

Sin embargo, no todos los comerciantes están contentos con el anuncio. De hecho, una buena parte teme que su clientela, cuando ya no pueda aparcar a la puerta de su establecimiento, optará por otras tiendas que sí le ofrezcan esa comodidad.

Los empresarios que sí están a favor de la reforma ponen como ejemplo la avenida del Balneario, la primera en superar este proceso: "Al principio, a los dueños de las tiendas tampoco les gustaba la idea, pero ahora no se la quites, aumentaron sus ventas". Además, los partidarios de la actuación sostienen que convertir estas calles en una zona agradable para el paseo permitirá que los residentes conozcan mejor la oferta comercial de la zona. "Si vienen en coche, van directos a una sola tienda, pero si tienen que caminar toda la calle, se quedarán con más locales", defienden.

En lo que todos coinciden es en que es necesario reponer, e incluso aumentar, las plazas de aparcamiento que se eliminen con esta actuación. Cuentan que un constructor ha ofrecido ya una parcela en la plaza de As Viñas como área de estacionamientos.

Un miedo general es el período de obras. El Concello anunció ayer que los trabajos se contratarán en diciembre y que empezarán en ese mismo mes, en el que se desarrolla la campaña a de Navidad. El equipo de gobierno se plantea interrumpir las labores para no perjudicar las ventas navideñas. Se retomarían para que la actuación pudiera finalizar en febrero.

Médico Amenedo Casabella, Canónigo Cándido Varela, Alcalde Francisco Fernández, Alcalde Generoso González Mes y el tramo inicial de Ría de Ferrol son las calles que pasarán a ser peatonales. Los vehículos podrán acceder a ellas con dos finalidades: entrar en los garajes de los edificios circundantes y realizar tareas de carga y descarga. La organización del tráfico será similar a la que funciona en la avenida del Balneario, ya que todas las vías que se someterán a reforma conectan con ella. La estética también será similar a los de la peatonal principal. Se usará adoquines de piedra en la franja central y losas del mismo material, en las franjas laterales. También se instalará mobiliario urbano como bancos, farolas y papeleras, además de parterres de arbolado de poca altura.

La reforma, que afectará a más de 2.000 metros cuadrados, cambiará "totalmente unas calles que sufrían una reducida superficie de aceras, un tráfico lento y dificultoso y unos aparcamientos de reducidas dimensiones", sostiene el Concello.