Vecinos de la zona que atravesará el vial 18 temen sufrir daños si las obras incluyen voladuras. Los residentes en viviendas próximas al trazado propuesto por el Ministerio de Fomento para enlazar la autopista AP-9 con la tercera ronda inciden en que gran parte de esos terrenos son de monte o se asientan sobre roca, por lo que sospechan que las explosiones controladas serán el único modo de realizar los desmontes. El proyecto para el vial elude avanzar si se realizarán voladuras o no y se limita a establecer las medidas correctoras que deberían adoptarse en caso de que sí se recurriera su uso.

Residentes en zonas próximas al trazado del vial 18 temen que se realicen voladuras y provoquen en sus viviendas consecuencias como la aparición de grietas. De hecho, estudian la posibilidad de recurrir a un notario que de fe del estado actual de las casas si se confirma que los desmontes se van a realizar con explosiones.

Los vecinos creen que lo más probable es que sí se realicen voladuras ya que una gran parte de los terrenos por los que pasará el vial rocosos, como el área más próxima a la autopista, o monte que habría que rebajar.

El proyecto detalla que "en el caso que sea necesaria la realización de voladuras, éstas se realizarán adoptando las siguientes medidas: se minimizará la carga de explosivo por unidad de microrretardo; se realizará un seccionamiento de las cargas dentro de los barrenos y se procurará su ignición en tiempos distintos; se procurará la reducción del diámetro de perforación y acortamiento de la longitud de los barrenos; y se recurrirá a la disposición de los frentes con la mayor superficie libre posible".

El proyecto incluye las voladuras, además, entre las operaciones que deben realizarse "en acuerdo con las prescripciones antes establecidas al efecto en el programa de medidas correctoras", junto con las operaciones de carga y descarga y los movimientos de maquinaria y personal de obra.