El Ayuntamiento, tras negociaciones con el administrador concursal de la UTE O Piñeiro Miño, ha logrado una rebaja de 1,2 millones de euros en el importe del aval de 3 millones más 1,5 millones de intereses que debía devolver de aquí a abril de 2018 a la unión de empresas por la anulación del contrato de adjudicación de la macrourbanización de 700 viviendas que pretendían ejecutar en pleno centro del municipio, en una zona privilegiada con vistas a dos playas y al lado de unas marismas. El acuerdo pasa por empezar a pagar antes, este año, y terminar más tarde, en 2020.
Los 4,5 millones en total que debía devolver el Concello por lo tanto al final serán solo 3,3, según aseguró ayer el Gobierno local. La UTE formada por varias sociedades entró en concurso de acreedores a principios de este año, agobiada por el aval depositado y los créditos pedidos a bancos para comprar en su día los terrenos de O Piñeiro en los que pretendía construir.
El Concello ofreció adelantar el abono y pagar ya este año y, poco a poco los siguientes hasta 2018 (en lugar de esperar al último año), a cambio de una quita, lo que el administrador concursal aceptó.
El adelanto de parte del dinero a devolver se realiza, según confirmó ayer el alcalde, Jesús Veiga, por la "buena situación económica de la Tesorería municipal". El acuerdo incluye una rebaja de 600.000 euros en el principal del aval, 3 millones; y otros 600.000 en el importe de los 1,5 millones de intereses a devengar desde 2006 en que se depositó dicho aval hasta 2018.
El regidor señala que esta última rebaja se logró al liquidar los derechos sobre el principal ya rebajado (2,4 millones) y al contar como fin del período de intereses el 41 de octubre de este año y no el año 2018. Miño prevé devolver los intereses a partir de la fecha de amortización del principal, comenzando en julio de 2019 y finalizando en diciembre de 2020. Con los tres millones que en su día el Concello cobró como aval realizó en estos años diversas obras municipales.
"Tenemos una buena situación económica porque ya no tenemos asesor jurídico ni urbanístico, nos lo hace gratis la Diputación. En O Piñeiro aún tenemos el 10% del aprovechamiento, que vale 5 o 6 millones, cuando se urbanice, y se hará, Piñeiro es la joya de Miño", anunció Veiga, que agregó que espera negociar otra rebaja del dinero a devolver a la UTE el año que viene.
Mientras se paga a estas empresas, los expropiados de Miño siguen esperando por sus 25 millones "Aún no hay resolución judicial definitiva. Mientras exista Fadesa, ella debe pagar", agregó el alcalde.
