Arteixo inició el lunes pasado los trabajos para derrumbar el viejo Concello. Los operarios instalaron los andamios alrededor del edificio como primer paso para comenzar a derrumbar la estructura. El Gobierno local tuvo que mover los cables de la luz y de teléfono previamente para permitir la obra. La estructura albergaba las oficinas municipales y tenía un piso entero dedicado al juzgado en el que estaba también el Registro Civil. El Ejecutivo municipal prevé ampliar la calzada y la acera existente en la travesía de Arteixo para mejorar la accesibilidad.