La Xunta ha asegurado al Concello de Culleredo que sí concedió licencia para la tala forestal que pudo afectar a una mámoa en el Monte Xalo. El Ayuntamiento afirma que, tras interesarse por lo ocurrido, a raíz de la denuncia presentada por un experto que asegura apreciar daños a consecuencia de los trabajos en el monte, el Gobierno gallego detalló que sí había autorizado la tala y admitió que el maderista que la realizó no había retirado todavía los restos. Agentes de la Policía autonómica y técnicos de la Dirección Xeral de Patrimonio visitaron ayer la Medoña de Chan do Castelo para comprobar si, como denunció un experto ante la Xunta, los trabajos de tala dañaron la mámoa, de seis mil años de antigüedad.
Los efectivos de la Policía autonómica y los técnicos de Patrimonio visitaron ayer el yacimiento, al igual que personal del Ayuntamiento de Culleredo. Los especialistas informarán en los próximos días a la Xunta sobre los resultados de la inspección realizada en la mañana de ayer en la zona del enterramiento megalítico. En respuesta al Concello, la Xunta precisó que la tala contaba con el correspondiente permiso autonómico y se había adjudicado a través de una puja a un maderista, que todavía no había limpiado la zona. Para evaluar las posibles consecuencias deberá esperarse a la conclusión de los informes.
Culleredo asegura que no había recibido ninguna notificación de la licencia de tala por parte de la Xunta. El Concello reclamará al Gobierno gallego que le comunique cada autorización de tala que conceda para poder llevar un mayor control y seguimiento.
