Los pequeños del campamento urbano de Navidad de Culleredo probaron sus dotes como horticultores para despedir el año. Entre las actividades de esta edición, además de los talleres y juegos habituales, los niños visitaron los huertos urbanos e hicieron una siembra en las parcelas municipales dedicadas al cultivo de alimentos destinados a la despensa municipal, que los distribuirá entre las familias con pocos recursos del ayuntamiento.
Los chicos celebraron ayer una suerte de fin de año adelantado para clausurar el campamento. En la jornada de cierre, los participantes en las actividades recibieron la visita de la concejal de Cultura, Carmen Varela.
