Decenas de conductores se movilizaron ayer para exigir al Ministerio de Fomento la supresión del peaje de Pastoriza en vez de la construcción de una carretera que vaya hacia la tercera ronda. Una caravana de unos cuatro kilómetros de largo formada por 270 vehículos recorrió el nuevo acceso al puerto exterior de Langosteira por completo. En la protesta participaron decenas de residentes de Arteixo en sus turismos particulares, a los que se unieron cerca de veinte camioneros y otros tantos motoristas.

La marcha estuvo encabezada por el alcalde, Carlos Calvelo, que convocó la protesta debido a que Fomento deberá abonar el peaje en sombra de cada uno de los vehículos que utilice el acceso a la dársena de Langosteira. "Por cada coche será 1,10 euros y por los camiones 1,85", explicó. El departamento estatal actualmente únicamente asume el peaje para el tráfico de punta Langosteira y no para el resto de usuarios de la autopista. Para el regidor esta acción contra el peaje "no es una actitud irresponsable"

Los miembros de la Plataforma para la Eliminación del peaje de la AG-55 y la no construcción del nuevo enlace de Pocomaco también se unieron a la concentración. Repartieron carteles en los que se veía Arteixo libre de PPeaxe. Y algunos los pegaron en sus coches. Los tres grupos políticos de la oposición (PSOE, BNG y TeGa) participaron en la caravana hasta el acceso al puerto exterior. Eso es lo que aprobaron en la declaración institucional de abril contra el peaje. En ese acuerdo los grupos aceptaron convocar una manifestación.

El regidor arteixán convocó esta protesta después de que el Gobierno central abriese la nueva autovía sin acceder a su petición de crear una mesa de negociación para analizar detalladamente la supresión del peaje de Pastoriza. Para Calvelo la manifestación fue un éxito porque se desarrolló "todo con tranquilidad" y no hubo incidentes. Solo hubo que lamentar una pequeña colisión entre un coche y otro cuando participaban en la caravana.

Fomento pretende construir una nueva carretera hacia la tercera ronda que costará 32 millones de euros (el alcalde lo eleva hasta los 40 millones porque incluye el enlace de Pocomaco) y no eliminar el peaje entre A Coruña y Arteixo, que según el Concello cuesta 22,3 millones de euros. El alcalde señaló que el objetivo de esta marcha era que los vecinos pudiesen "ver in situ la reivindicación" del Concello.

La Asociación de Empresarios del Polígono de Sabón también arropó a Carlos Calvelo en la manifestación. El presidente, Manuel Rivas (del PP), indicó que acudió a la marcha porque la entidad de Sabón ya había empezado "antes que Arteixo" con esta reivindicación. "Cuando se construía la AG-55 mandamos escritos a la Xunta y a Fomento para que no pusiesen el peaje en Pastoriza", afirmó.

El presidente de la entidad destacó además que la asociación ya advirtió hace años que la carretera que une Arteixo y A Coruña por A Maceira sufriría un "colapso" porque la utilizan muchos trabajadores para desplazarse hasta el polígono. Rivas también explicó que apoya la petición del Ayuntamiento porque el vial que proyecta Fomento cuesta "el doble de dinero público" que la supresión definitiva del peaje entre A Coruña y Arteixo.

El alcalde de Arteixo explicó ayer que el Concello solicitará al Ministerio de Fomento y a la Xunta los informes jurídicos sobre la obra del acceso a Langosteira para poder analizarlos y así estudiar la viabilidad de una denuncia ante la Unión Europea. "Lo vamos a estudiar con un gabinete especializado", aseguró Carlos Calvelo. Una vez estudiado se presentará la denuncia por la vía adecuada, según afirmó el alcalde.

También criticó que se haya plasmado por escrito en el convenio firmado por Fomento, Xunta y concesionaria de la AG-55 que parte de la obra quedará "inutilizada". Calvelo calcula que eso supondría abandonar una parte de la obra que ha costado 23 millones de euros y que fue financiada con fondos europeos.