De prometer 1,3 millones para un centro de día a aportar un máximo de 200.000 euros para un "centro social de mayores". La Xunta agota su segundo mandato sin hacer realidad buena parte de los proyectos incluidos en el plan de viabilidad de la fusión de Oza dos Ríos y Cesuras y, en plena precampaña, ha enviado al concello fusionado un convenio, aprobado ayer por el pleno, que rebaja considerablemente una de las principales promesas sobre la que se apuntaló la alianza.
En base a este acuerdo, el Consorcio Galego de Benestar se compromete a contribuir con 200.000 en la construcción de un "centro social de mayores" cuya ubicación no se concreta. La Xunta reparte la ayuda en tres anualidades: 2016, 2017 a 2018. La Consellería de Política Social solo consigna 15.000 euros este ejercicio y aplaza a la próxima legislatura el grueso de la inversión, 92.500 euros en 2017 y 92.500 euros en 2018.
La Xunta apela en el escrito a la petición expresa del Ejecutivo municipal de colaboración para construir un centro social que "atienda la gran demanda de la población del municipio de edad avanzada" y dote a los mayores de "un espacio de encuentro y con servicios adaptados a sus necesidades".
La construcción de este "centro social de mayores" dista mucho del centro de día residencia prometido en plenas negociaciones como "premio" por la fusión. El plan de viabilidad recogía que había "avanzadas negociaciones con la Administración estatal y autonómica para construir un centro de día residencia de la tercera edad para 40 residentes que pasaría por la restauración del sanatorio de Cesuras y la construcción de un edificio anexo con un presupuesto orientativo de 1,3 millones". El proyecto incluía el plano de la propuesta de rehabilitación y ampliación del sanatorio y advertía de que "obviamente, la consecución de esos ambiciosos objetivos" pasaba "necesariamente por el éxito de la unión voluntaria. La fusión entre Oza dos Ríos y Cesuras se aprobó de forma definitiva en enero de 2013. Han pasado más de tres años y ni Xunta ni Estado han informado de novedades en el plan para recuperar en sanatorio y convertirlo en un centro de día residencia a pesar de que el plan de viabilidad aseguraba en 2012 que las negociaciones estaban "avanzadas".
El desembarco ahora en pleno del convenio para un centro de mayores fue acogido con sorpresa por la oposición, que vinculó el acuerdo con la cita con las urnas del próximo 25 de septiembre.
