La Consellería de Medio Ambiente analiza una propuesta de modificación puntual del planeamiento para adaptar a la nueva ley de suelo un desarrollo urbanístico de Cambre, cuya urbanización recogía ya como "prioritaria" en 1994, cuando estrenó las normas subsidiarias. La propietaria de los terrenos hace un prolijo relato de los escollos que han demorado la ejecución de esta actuación urbanística próxima a O Temple, que tuvo que adaptarse al Plan do Litoral, después a un proyecto viario y que ahora tiene que reanudar el proceso por los cambios en la ley de suelo.

Se trata del ámbito SAU-RD1, ubicado en A Barcala a continuación del núcleo urbano de O Temple, del que solo le separa una calle. El sector SAU RD1 estaba incluido en las normas subsidiarias y abarcaba un área de 3,25 hectáreas de suelo apto para urbanizar con una densidad máxima de 0,60 viviendas por hectárea. Las normas establecían que la ordenación se resolvería a través de un plan parcial.

La propietaria mayoritaria del ámbito es Vernalia Inversiones, que ha tramitado varios planes en los últimos años que han quedado inconclusos por la necesidad de adaptarse a los cambios en las leyes del litoral y del suelo, además de verse obligada a paralizar la actuación por la previsión de un nuevo viario.

La promotora ha tramitado una propuesta de modificación de las normas subsidiarias al entender que los cambios en la ley de suelo podrían dejar finalmente este ámbito de 32.474 metros cuadrados como suelo rústico. La empresa alega que la ley incurre en "contradicciones" y genera dudas sobre el tipo de suelo, por lo que propone modificar el planeamiento para que se ratifique la declaración del ámbito como suelo urbanizable delimitado.

Su propuesta pasa por fijar la superficie máxima construida en 21.108 metros cuadrados y destinar el 87% de la edificabilidad a vivienda colectiva con edificación abierta y el 12% a usos comerciales compatibles. Plantea, en total, 195 viviendas y alrededor de medio millar de plazas de aparcamiento. Precisamente la falta de estacionamiento en la zona ha obligado al Concello a llegar a acuerdos con la promotora para habilitar plazas de estacionamiento en el entorno del colegio Portofaro.

La actuación prevista ha sufrido numerosos cambios desde 1994. El primer escollo lo supuso la ley 6/2007 de medidas urgentes en materia de ordenación del territorio y del litoral, que decretó la suspensión del desarrollo y el 10 de febrero de 2011 la Xunta decretó un grado de compatibilidad 4 con el Plan do Litoral, lo que obligó a modificar el proyecto.

La promotora, Vernalia Inversiones SL presentó en 2013 el anteproyecto del plan de sectorización. En aquel momento estaba todavía vigente la anterior ley de suelo, que equipara los suelos aptos para urbanizar al suelo urbanizable no delimitado. La Xunta adoptó someter el plan de sectorización al proceso de evaluación ambiental estratégica y, poco tiempo después, la Axencia de Infraestruturas publicó en el Diario Oficial de Galicia el trazado de la conexión de la carretera DP-1706 con la AP-9 en A Barcala y que incluía la apertura de un viario que cruzaba en su parte final el ámbito.

El Concello de Cambre y la promotora del desarrollo alegaron contra el trazado propuesto y pidieron sin éxito que permitiese continuar con la tramitación del expediente. Dos años después, en 2015, la Xunta publicó el trazado definitivo, que ya no afectaba al ámbito.

Durante ese tiempo de paralización, promotora y Concello mantuvieron varias reuniones para mejorar la ordenación. Cuando estaba a punto de presentar el nuevo documento de inicio de la modificación puntual de las normas subsidiarias, la Xunta aprobó la nueva ley de suelo. La promotora advierte de que la redacción de la nueva normativa da lugar a "dudas" que podrían llevar a concluir que el ámbito "ha quedado clasificado como suelo rústico". La empresa incide en que el desarrollo permitirá crear dotaciones necesarias y revalorizar un espacio "degradado".