El Concello de Arteixo ha presentado a la Xunta un propuesta para modificar las normas subsidiarias de Arteixo y recalificar 100.771 metros cuadrados de suelo industrial de A Revolta, en Meicende con el propósito de "flexibilizar los usos". El proyecto, redactado por el Grupo TAU a iniciativa de una de las empresas con propiedades en el ámbito, Fomento de Iniciativas Comerciales SL, afecta a terrenos calificados como suelo urbano consolidado industrial y residencial y una bolsa de suelo urbano no consolidado de 13.500 metros cuadrados (UA-56), que reajusta para excluir los terrenos afectados por la AG-55 y del que sí aporta la ordenación detallada.

Los terrenos están ubicados a orillas de la autopista AG-55 y de la AC-552 y llevan varios años en estado de abandono, tras fracasar distintas iniciativas empresariales. Este plan de iniciativa privada no concreta los fines de esta recalificación, más allá de apuntar a la implantación de actividades comerciales y terciarias. La empresa plantea que los terrenos dejen de regirse por las ordenanzas INDU/URME, que ampara los usos industriales y residencial, con la posibilidad de usos hosteleros o comerciales complementarios (es decir, exclusivamente al servicio del personal del sector o integrados en la propia industria). En su lugar plantea acogerse a la ordenanza de actividades económicas y de servicios aprobada en 2016 por el Concello. Una opción que amplía el abanico de usos.

En el documento, la promotora destaca que con este cambio de calificación los terrenos podrán albergar "cualquier uso de actividades económicas y de servicios sin limitación : hotelero, restauración, oficinas, industria escaparate, pequeño comercio, pequeña industria taller, tecnológicos, dotaciones públicas o privadas, etc..." Los únicos usos prohibidos serían las grandes superficies comerciales y el residencial.

La empresa argumenta que las actividades desarrolladas en este ámbito eran originariamente industriales, pero que en los últimos años "se han ido incorporando actividades de servicio, comerciales, terciarios y auxiliares". El documento detalla que el ámbito mantendrá el coeficiente de edificabilidad, fijado en 0.80 metros cuadrados por metro cuadrado, salvo la unidad de actuación 56, que será de 3 metros cúbicos por metro cuadrado. La altura máxima permitida será de cinco plantas y la ordenanza autoriza también sótanos y semisótanos.

La promotora de la recalificación considera que se dan las razones de interés público para aprobar esta modificación puntual. Entre otras, apela a la conveniencia de dar "una ordenación coherente a un ámbito caótico fruto de una actuación asistemática en suelos no urbanizados en el que el viario público no discurre por suelos legalmente adquiridos". Admite también la existencia de actividades "que no tienen sustento en la normativa vigente" y defiende que la recalificación permitirá "transformar unos terrenos situados de forma estratégica sin distorsionar el equilibrio social y económico del entorno" y "favorece la imagen de Meicende como un área de actividades moderna". El Concello vaticina que el cambio de usos "mejorará de forma notable las posibilidades de empleo" y aumentaría los ingresos por tributos 39.620 euros.

El Concello de Arteixo ha realizado ocho modificaciones puntuales de las normas subsidiarias durante los mandatos del popular Carlos Calvelo. El Ejecutivo municipal sigue sin aclarar el futuro del plan general, tras dejar vencer el plazo del anterior contrato.